Los casales de verano toman medidas frente al calor
La Fundació Pere Tarrès aprovecha para explicar a los niños las consecuencias del cambio climático
La Fundació Pere Tarrès aprovecha para explicar a los niños las consecuencias del cambio climático
En los últimos años la Fundació Pere Tarrès (que este verano gestiona actividades para más de 3.000 niños y adolescentes en las comarcas de Tarragona) se ha visto obligada a tomar medidas para hacer frente al calor pero, sobre todo, ha aprovechado la circunstancia para hace reflexionar a sus participantes sobre el cambio climático.
Así lo explica Aina Espona, coordinadora de casales de la fundación, quien comenta que en los últimos años han debido adaptarse y tener cada vez más en cuenta el clima en la organización de las actividades, «no podemos pasarnos todo el día al aire libre como antes», reconoce.
En las salidas priorizan los espacios climatizados y las piscinas públicas. El equipo, además, está atento a la hidratación de los menores.
El año pasado las altas temperaturas obligaron a suspender algunas salidas a parques naturales. «Entonces hemos tenido visitas de los bomberos locales que nos explican qué pasa en los bosques cuando no reciben agua y el riesgo de incendios», ejemplifica.
Igual que el año pasado, y aunque se han levantado restricciones, otro de los centros de interés es entender qué sucede con la sequía. Desde el año pasado los tradicionales juegos con manguera han sido sustituidos por otros en los que no se malgasta agua. Un ejemplo es una gincana para ver quién consigue ahorrar más líquido.
Situación crítica
Un reciente informe de la fundación detecta que la situación socioeconómica de las personas que solicitan cada año becas para que sus hijos e hijas puedan disfrutar de actividades de ocio en verano se mantiene en situación muy crítica después de varios años seguidos de crisis. La situación es especialmente grave en las comarcas de Tarragona. Según el informe un 84,4 % de las familias de la demarcación que solicitaron una beca se sitúan por debajo del umbral de pobreza (tienen unos ingresos por debajo del 60 % de la media de Catalunya). Este dato es 5 puntos más que el año anterior (78,9 %) y 18 más que las familias analizadas en el conjunto de Catalunya (65,8 %).