La Part Alta lidera las solicitudes de ayudas a la rehabilitación
En total se han registrado 49 peticiones, que ahora tienen que estudiarse con la intención de abrir una nueva convocatoria
El Casc Antic es el barrio de la ciudad con más solicitudes de ayudas para la rehabilitación de viviendas, que abría por primera vez el Ayuntamiento de Tarragona. En total se han presentado 49 peticiones, de las cuales quince corresponden a la Part Alta. «Refleja la realidad del estado del parque inmobiliario del barrio, que sufre una degradación importante», apuntaba la concejal de Habitatge, Eva Miguel.
Ahora tendrá que hacerse una valoración para ver si todas ellas se aceptan y puede procederse al inicio de las obras, que permitirá que estos inmuebles se incorporen a la bolsa de mediación que gestiona el Servei Municipal de l’Habitatge i Actuacions Urbanes (Smhausa). Con todo, la presidenta de este organismo afirmó que «si salen adelante todas las peticiones, significará que la bolsa de mediación en la Part Alta ofrecerá más pisos que los portales privados, en los que no hay oferta de alquiler en esta zona».
La convocatoria se abrió a mediados del mes de diciembre y se cerró el 30 de junio. Era la primera ocasión en la que el Ayuntamiento de Tarragona ponía en marcha un programa de estas características, pensado para arreglar los pisos desocupados, con la posibilidad de financiar el 100% de las obras necesarias y un importe máximo de 18.000 euros.
Smhausa hizo hasta sesenta informes de acompañamiento, correspondientes a propietarios que en un primer momento se habían interesado en las ayudas. «Ha sido un éxito», aseguraba Miguel, quien apuntó que estas cifras son «muy superiores» a las de ciudades que también han impulsado programas similares, como es el caso de Reus. Las peticiones registradas al final se han traducido en estos casi cincuenta expedientes que son los que ahora están abiertos y que deben acabarse de estudiar para ver si se ajustan a los requisitos establecidos.
Por toda la ciudad
Otro de los aspectos positivos que valoraba muy positivamente es que «la distribución por toda la ciudad nos ayuda a completar los agujeros que teníamos en la bolsa de mediación», decía Miguel. Tras la Part Alta, el Eixample Nord es la otra zona en la que este programa ha despertado más interés, con catorce solicitudes, seguido del Barri del Port (5), Sant Pere i Sant Pau (4), Sant Salvador (4), Bonavista (2) y Boscos, La Floresta, Eixample Sud y Campclar con una. «Llegamos a sitios en los que no lo habíamos conseguido», apuntaba la concejal cupaire.
Según explicó el Ayuntamiento, la mayoría de las solicitudes corresponden a particulares que habían heredado un inmueble, que estaba desocupado ya que no estaba en condiciones para el mercado del alquiler. También hay una empresa que cumplía con las bases de la subvención que, por otro lado, excluía a los grandes tenedores. Asimismo, desde Smhausa se ha hecho una campaña para facilitar que los propietarios que ya tienen su piso en la bolsa de mediación también pudieran acogerse al programa, renovando de esta forma su compromiso y prolongando el contrato que mantienen. De los 87 propietarios que actualmente nutren esta bolsa, trece han decidido pedir las ayudas, por lo que si prosperan todas las solicitudes cuando se acabe todo este proceso se habrán incorporado un total de 36 pisos, llegando la cifra final a 123.
Eva Miguel defendió que las ayudas a la rehabilitación constituyen un «win-win», ya que la administración local puede gestionar estos alquileres con un precio entre un 10 y un 20% por debajo de la media. «Si nos llegaran más pisos podríamos tener un impacto en el mercado privado», apuntaba.
El siguiente paso será el estudio detallado de cada uno de los expedientes para valorar si los propietarios pueden seguir adelante e iniciar las obras. Esto permitirá conocer el importe real que se ha gastado, teniendo en cuenta que la partida total disponible ascendía a 1,1 millones de euros. Esta no se ha agotado, ya que si todas las solicitudes fueran por el importe máximo todavía quedarían 218.000 euros disponibles. Por este motivo, la concejalía de Habitatge tiene previsto abrir una segunda convocatoria, que de momento no tiene fecha y que tendrá que verse si puede complementarse en nuevos recursos.
«Era la primera vez que se hacía y mucha gente no lo conocía», apuntó Miguel. Desde este departamento se hizo una campaña comunicativa para dar a conocer las subvenciones y se hicieron charlas con los agentes del sector para esta divulgación. No obstante, la responsable de Habitatge reivindicaba que estas ayudas, junto con las partidas destinadas a la compra de viviendas por tanteo y retracto, puedan consolidarse dentro de los presupuestos municipales. «Es lo único que a nivel municipal podemos hacer para defender el acceso a la vivienda», justificaba.
Los pisos de la bolsa de mediación van destinados a las personas con menos ingresos y entre los requisitos que tienen que cumplir es el de no superar el 40% de los ingresos a pagar el alquiler.