La operativa para reflotar el velero durará veinte días y empezará este mes

Un mes y veintiséis días han pasado desde que el velero Eleonara se hundiera en las instalaciones del Marina Port Tarraco. Todavía no ha sido remolcado. Poco a poco van conociéndose más detalles sobre el plan que, el pasado 27 de julio, la compañía de seguros presentó para reflotar el velero. La operativa durará 20 días y todo apunta a que empiece este mes de agosto. De no ser así, la situación en la Marina Port Tarraco sería preocupante, teniendo en cuenta que en septiembre empieza la temporada alta para este recinto.

Cabe recordar que los hechos tuvieron lugar el pasado 10 de junio, cuando una embarcación de Salvamento Marítimo chocaba contra el velero Eleonora, provocándole un agujero en la nave, que acabó por hundirlo al fondo del mar.

La compañía de seguros del velero llevó a cabo un concurso, en el que se presentaron hasta cuatro empresas para reflotar el Eleonora. Todavía no ha trascendido a los medios el nombre de la ganadora, pero, según ha podido saber el Diari, se trata de la compañía que apostaba por una operativa menos agresiva con el entorno. En algunos casos, el plan hablaba de derribar alguna parte de las instalaciones de la Marina Port Tarraco. Finalmente, no será así

La operativa durará veinte días y la fecha de inicio se concretará cuando se contrate la empresa adjudicataria, encargada de ejecutar el proyecto de reflotamiento. El pasado 27 de julio, el plan provisional fue presentado ante la Autoritat Portuària, quien dio su visto bueno. Una vez se conozca el proveedor, el proyecto ya será definitivo. Todo apunta a que los trabajos empiecen antes de terminar este mes de agosto.

El proyecto cuenta con un centenar de páginas y relata de manera detallada y exhaustiva cómo se retirará el Eleonora, con mucha información y cálculos. Habla de que serán necesarias dos grúas en el suelo que servirán de apoyo, además de utilizar otros dispositivos, como por ejemplo, globos de aire. El velero, que ha sido declarado pérdida total, se sacará del agua entero, y no a trozos, como se había dicho en un principio. Será trasladado rápidamente al varadero.

El plan está muy avanzado y solo falta el último paso: contratar la empresa proveedora, que se encargará de llevar a cabo los trabajos. Una vez formalizado el contrato, la operativa comenzará.

Tanto la Marina Port Tarraco como la Autoritat Portuària han requerido al propietario del velero, en infinidad de veces, que la tramitación se acelerase, teniendo en cuenta el funcionamiento normal de las instalaciones. De hecho, fuentes del entorno portuario aseguran que septiembre es uno de los meses más importantes de todo el año, ya que empiezan a llegar barcos y yates en el lugar. En octubre está todo lleno. La demora de la retirada del velero podría perjudicar, no solo a nivel de imagen, sino también económicamente hablando, a la Marina Port Tarraco.

Paga P&I

Quien se ha encargado de la gestión y financiación de estos trabajos es lo que se conoce como P&I, una asociación de seguros mutuas que ofrecen la posibilidad de compartir riesgos e información. Estos clubs cooperan para proporcionar fondos en caso de grandes reclamaciones. Su sede se encuentra en Peek House, en Londres. La principal diferencia con una aseguradora marítima es que estas ofrecen seguros sobre riesgos medibles, es decir, para la maquinaria, el chasis o la carga. En cambio, el club P&I responde ante riesgos más amplios e indeterminados que, por norma general, no cubren las compañías ordinarias.

Uno de los aspectos que todavía no ha trascendido de la operativa es su coste. Prefieren adjudicar los trabajos, antes de poner un precio. No obstante, expertos en la materia apuntan que el dispositivo de reflotamiento podría ascender entre 50.000 y 100.000 euros.

No hubo mala praxis

Paralelamente a esta tramitación, la Guardia Civil dio por cerrada la investigación del suceso. La conclusión, según explicaban hace unos días fuentes policiales, es que el Punta Mayor –nombre del buque de Salvamento Marítimo– sufrió un fallo mecánico que no le permitía tirar adelante con el motor en marcha. Para la Guardia Civil, lo ocurrido fue un accidente y descarta que hubiera mala praxis.

Antes de los hechos, el Eleonora se dedicaba a hacer trayectos charter. Para hacernos una idea del valor del velero, el precio era de 73.300 euros a la semana, según algunos portales especializados. Además, el Eleonora también estaba a la venta por 6,9 millones de euros. El casco de la embarcación es de acero y la estructura interna de madera. Podían viajar en él ocho pasajeros, además de los nueve miembros de la tripulación.