La nueva Capona busca 300 socios que aporten 200 euros para consolidar la librería
La Cooperativa Combinats y los socios fundadores escenifican el esperado relevo para salvar el negocio. Gobierno municipal y sociedad civil celebran la reactivación del emplazamiento
La nueva La Capona, que espera reabrir antes de las fiestas de Santa Tecla, ya tiene una nueva hoja de ruta: atraer a un mínimo de 300 socios que aporten 200 euros cada uno. De esta forma, según los responsables de la Cooperativa Combinats, con estos 60.000 euros se consolidará el histórico negocio que abrió sus puertas en 1997, que las cerró el pasado 30 de junio y que, ahora, se espera que reabra este mismo mes de septiembre con un plan de renovación de cinco años
Ayer se escenificó la actualización del negocio, en una comparecencia pública en la que los tres socios fundadores de La Capona (Pitu Rovira y Ricard y Pau Espinosa) dieron el relevo y las llaves del local de la calle Gasòmetre a los cuatro responsables de la Cooperativa Combinats: Jordi Collado, Jordi Vinyoles, Raquel Barbier y Carlos Domènech, que estuvieron acompañados por el nuevo director de la librería, Oriol Picas.
El director de Combinats, Jordi Collado, destaca que la operación se realiza «con voluntad de servicio público» y el deseo de «no perder un eje cultural tan importante para la ciudad como es este», mientras que Picas recalca que el objetivo de esta nueva etapa es «poner en el centro a la ciudadanía» a través de una programación «vinculada estrechamente con Tarragona y crear sinergias con otros actores culturales».
Por su parte, Pitu Rovira remarca que «hemos logrado desencallar una operación que se inició el mismo día que cerramos», enfatizando que los tres fundadores están «muy satisfechos» con el resultado final de las negociaciones porque con la nueva fórmula «se dará continuidad al proyecto con gente muy válida». Ricard Espinosa valora la importancia de «tratar bien» a los autores locales desde La Capona, así como de «continuar vinculados en iniciativas culturales».
«Un punto de encuentro»
La noticia fue recibida con alegría desde el gobierno municipal. «Es muy relevante recuperar una librería de esta trayectoria. En realidad, significa mantener un punto de encuentro y de actividad cultural más allá de la comercial. Es un valor descomunal para la ciudad», destaca el alcalde, Pau Ricomà (ERC). Por su parte, la concejal de Cultura, Inés Solé (CUP), valora que «Tarragona necesita de estos pequeños oasis culturales que son las librerías, y el paso para que sea como cooperativa es un giro muy interesante», recalca la representante del ejecutivo de la Plaça de la Font.