La noche de las supervivientes en la casa Joan Miret

Debería ser el día de estas heroínas, como las llamó Ana Ibars, la directora de la Casa Joan Miret de Tarragona. Además de concienciar sobre la investigación contra el cáncer de mama, tendríamos que reconocer más el valor de todas las mujeres que han luchado contra el cáncer de mama.

Así quisieron demostrarlo este jueves en el número 36 de la capital. La emblemática casa Miret i Terrada acogió la cena benéfica organizada por el Rotary Club Tarraco August y la agencia AG Planning, en beneficio de la Asociación Española contra el Cáncer de Tarragona. Una velada que cerró el Día Mundial de la Investigación contra esta enfermedad, de la que fueron diagnosticadas 27.000 mujeres el pasado año, y que tuvo como acto previo una encendida de luces de color rosa en el Ayuntamiento.

Casi ochenta personas de todos los sectores se dieron cita a la cena, entre los que contaron el pdte. del club Rotario, Josep Miquel Molero; su homónimo del club de Reus, Nicolás Dubuy;  los pdtes. de los colegios profesionales de Ingenieros y Médicos de la ciudad; la concejal de Relacions Ciutadanes, Elvira Ferrando; y empresarios del territorio y otros simpatizantes con la causa.

Asimismo, la noche contó con la conferencia de la doctora Cèlia Vives, de Embriogyn. Explicó cómo afecta positivamente en el tratamiento a las mujeres diagnosticadas de cáncer la conservación de óvulos para que, una vez se curen, mantengan la posibilidad de tener sus propios hijos. Fue una cita en la que no solo se recaudó para la investigación (1.180 euros), sino que también se quiso dar coraje y valor a las mujeres para afrontar el cáncer.