«La Capona no competirá en precio con Amazon, pero sí en tiempo y atención»

¿Por qué gente joven toma el relevo de un negocio veterano como es una librería?

J.C: El relevo generacional también será un relevo de modelo, actualizándolo. El comercio está en un proceso de cierre que no parará en los próximos años porque quien los abrió en los noventa se está jubilando.

O.P: La Capona tiene 25 años de historia, y a nosotros es lo que nos falta aproximadamente para jubilarnos (ríen).

Están en la misma edad que tenían Pitu Rovira y los hermanos Espinosa cuando la abrieron.

O.P: Exacto. Lo que no queríamos era que se perdiera este espacio y el retorno que tiene hacia la sociedad, no solo como librería sino también como espacio cultural.

¿La Capona apostará más por ser un espacio cultural que por una librería normal?

J.C: El modelo se basa en los libros, pero no iremos a sacar el máximo rendimiento. Queremos impregnar a la propia ciudad, lo que nosotros hacemos ahora es poner un puente y decidir entre todos si lo cruzamos o no.

O.P: Queremos hacer muchas cosas y que la ciudadanía esté al frente. Buscamos su complicidad.

¿Por cuánto tiempo es este puente?

El plan de trabajo es para cinco años.

¿La Capona reabriría igualmente si tuvieran cero socios ?

Si esto pasara la acabaríamos traspasando, ya que sería muy aburrido. Nosotros no somos libreros.

¿Cuántos socios han logrado desde el viernes?

Ahora estamos en 70, es un buen ritmo. Estoy seguro que esta semana llegamos a los cien.

¿El objetivo es llegar a 500?

J.C: Con 300 damos un salto cuántico. Sería un punto de partida de mucha tranquilidad, no solo a nivel económico –que también–sino para conocer la fidelización. La Capona tiene una base de clientes de 1.500 personas que igual vienen una vez, diez ó 50 veces al año. Buscamos personas que una vez al mes pasen por aquí. Y esto lo generaremos con mucha actividad cultural propia.

¿Cómo funcionará? Los socios ponen 200 euros y se les irán descontando con libros?

J.C: Cuando vengan a comprar libros tendrán, de entrada, un 5% de descuento, que es lo máximo que permite la ley. Y también se restará de la compra avanzada de 200 euros un porcentaje por cada libro comprado, que será de un 20%-25% del precio.

(A Oriol Picas) ¿Qué librería tiene en la cabeza? Usted ha estado 15 años en la Cooperativa Abacus.

O.P: Sí. No podía comprender que una librería de referencia cerrara, no entendía que no hubiera relevo. Tenemos claro que el nuestro no será un modelo clásico de tener libros y presentaciones. Buscaremos las sinergias con la ciudadanía, comercios y artistas. Podemos hacer podscats o colaborar con bodegas para catas de vino.

J.C: Haremos lo que en el capitalismo se llama la venta cruzada. Jugaremos a esto, hay comercios que en el día a día ni se miran. Esta semana nos haremos de La Via T.

¿La colaboración mutua es el futuro del pequeño comercio?

J.C: Sí, debemos muscularnos entre todos. Y aquí debemos impulsar los APEUS. Creemos en este modelo, teniendo en cuenta de que seremos el único comercio de la ciudad sin ánimo de lucro. No repartiremos beneficios.

Pero imagino que tendrán los libros mediáticos de cada momento.

O.P: Sí, claro. La idea es un modelo sostenible. Pero en lo que haremos énfasis será en trabajar con las editoriales de aquí. Queremos que esta sea su casa para dar protagonismo a los autores locales y que vengan a presentar sus obras.

J.C: Hay tres pilares: libros de y sobre Tarragona; novedades; y el infantil y juvenil.

¿Por qué apuestan tanto por esta última modalidad?

O.P: Si queremos estar 25 años en activo necesitamos que nuestro público crezca con nosotros.

¿Esta será la gran diferencia con La Capona 1.0?

J.C: El cambio será en el fondo de libros. Ya tenemos la capacidad para tener una obra en 24-48 horas. No competiremos en precio con Amazon, pero sí en tiempo y atención. Y habrá una apuesta muy fuerte por el online. Igual que La Capona fue pionera en los lectores de precios, ahora debe apostarse por una página web nueva, redes sociales, cambiar la imagen e impulsar La Capona 2.0.

O.P: Es una cambio ilusionante, estoy convencido que hay futuro.

¿La gente compra libros?

O.P: Es sorprendente la gente que ha dejado el e-book. A corto plazo, el papel no desaparecerá. Las previsiones son positivas.

J.C: El papel tiene futuro. ¿Me voy a poner a leer en una máquina que tiene Youtube? Los modelos educativos incorporan la tecnología como herramienta, pero no como base. Con Combinats, por ejemplo, queremos impulsar proyectos con colegios para facilitar el alquiler de libros.

¿Qué cambios habrá en el local?

O.P: El primero es que la temática local estará en la entrada, no en los rincones.

¿Qué día abrirán?

J.C: Hay una porra en juego (ríe). La semana del 19, antes de que suene la Amparito.