Jóvenes a la caza de nuevos oficios en Tarragona
Sociedad. Un grupo de alumnos se forma en el manejo de redes sociales y luego será contratado por el Ayuntamiento durante seis meses. Así son las nuevas Casas d’Oficis
Un despliegue de cámaras y móviles se concentra ante el mostrador de una pescadería del Mercat Central de Tarragona. Detrás hay una decena de jóvenes concentrados en tomar fotos y vídeos de unas mairas desde todos los ángulos posibles. Las imágenes que están registrando son las que podrán verse estos días en las redes sociales de la campaña ‘Peix de Tarragona tot l’any’.
Pero no, no se trata de un grupo de influencers al uso. Todos son alumnos de la Casa d’Oficis de ‘Creación de contenidos y gestión de redes sociales’ del Ayuntamiento de Tarragona. Y es que, pese a que en el imaginario colectivo las casas de oficios suelen relacionarse con trabajos manuales, lo cierto es que en los últimos años se han ido adaptando a aquellos campos en los que podría haber más empleo. Así lo explica Alba Navarro, directora de la Casa d’Oficis de Tarragona, un proyecto que este año ha llegado a su décimo primera edición.
En esta oportunidad funcionan, además, una casa de oficios de restauración y rehabilitación de pintura y otra de trabajos forestales, que es nueva de este año.
Se trata de un programa de un año en el que los jóvenes reciben formación práctica durante seis meses y son contratados otros seis por el Ayuntamiento de Tarragona para realizar trabajos en la ciudad.
Más demanda que oferta
Para poder participar es necesario tener entre 16 y 29 años, ser demandante de empleo, no estar estudiando y tener un título de la ESO o equivalente (en el caso de que no se tenga se puede realizar una prueba de acceso). Es indispensable, además, ser residente de la Part Alta o de Campclar ya que en la primera edición estos fueron los dos barrios elegidos de acuerdo con la Generalitat por sus circunstancias socioeconómicas.
Navarro reconoce que, si se da la oportunidad, se debería estudiar incluir otros barrios. Además, como se trata de grupos reducidos, siempre hay más demanda que oferta. El proyecto está subvnecionado por el Servei Públic d’Ocupació de Catalunya en el marco del ‘Programa de suport als territoris amb majors necessitats de reequilibri territorial i social: projecte Treball als barris’.
El perfil de los jóvenes que acuden es variado, pero el abandono escolar suele ser una historia recurrente. Aunque la intención es que los jóvenes adquieran nociones de un oficio con el que puedan ganarse la vida, lo cierto es a lo largo de la formación terminan por darse cuenta e que necesitan estudiar más para conseguir un empleo en condiciones por lo que muchos regresan al sistema escolar.
Nativos digitales
Cuenta Arnau Curto, periodista y profesor de la casa de creación de contenidos, que al hablar con sus alumnos «se nota que son nativos digitales, no tienes que explicarles qué es un reel». Ha encontrado, además, que se han enganchado rápido a las clases y que tienen mucho potencial. Por otra parte, como les separa poca distancia de edad, también se ha creado un clima de confianza para hablar de otros temas como consejos para encontrar trabajo o un piso.
Fátima, de 23 años es una de las participantes y dice estar «muy agradecida por esta oportunidad». Ella hizo un grado medio de otro ámbito y este año no estaba estudiando. El curso no solo le ha descubierto un mundo que le encanta, sino que la ha reafirmado en la idea de que hay que seguir formándose, así que está segura de que irá a por el grado superior. Casos similares son el de Sandra (25) y Cristian (21). Este último cuenta que estaba buscando trabajo y está viendo muchas posibilidades en el campo de las redes sociales. Además, ha podido conectar con gente de su barrio que tiene los mismos intereses.
Actualmente, mientras se forma, el grupo está haciendo trabajos para el Ayuntamiento, pero la intención es que se dediquen de lleno, con un trabajo remunerado, de mayo a octubre.
La concejala de Promoció Econòmica, Montse Adan, apunta que es una idea en la que todos ganan. En el caso concreto el pescado de Tarragona, tal como recordara en la presentación de la campaña «la promoción comercial del pescado local logra más difusión y fuerza gracias a un programa de formación y ocupación que contribuye a la vez al reequilibrio territorial y social... Esta transversalidad es una línea de trabajo que se tiene que potenciar como administración pública porque redunda en beneficio de todo el mundo».