El poder empresarial de Tarragona reclama menos impuestos al nuevo Gobierno
Las infraestructuras y reducir la presión fiscal, entre la lista de reivindicaciones de las patronales o las cámaras de comercio
De la reducción de impuestos a la finalización de infraestructuras claves como el Corredor, pasando por un adelgazamiento de la burocracia. La lista de encargos del poder empresarial al nuevo Gobierno del PSOE es extensa.
Xavier Rigau, presidente de la Confederació Empresarial de la Província de Tarragona (CEPTA), reclama «la reducción del déficit fiscal con Catalunya, para poder tener más dinero para infraestructuras y poder bajar la presión fiscal de la Generalitat, que es mucha, o el cumplimiento del pacto de infraestructuras que nunca se lleva a cabo». Rigau denuncia que «muchas empresas prefieren instalarse en Aragón o en Madrid, porque hay menos presión fiscal».
Además, indica reclama al nuevo ejecutivo «que no haga políticas que aumenten los costes de personal en las empresas y que afecta a la productividad». Por último, plantea «una reducción de la burocracia y agilizar la justicia a nivel laboral, porque no puede ser que estés tres o cuatro años pendiente de un juicio o de una resolución de un asunto».
Next Generation ágiles
Jordi Ciuraneta, presidente de Pimec en Tarragona, pide igualmente «menos burocracia, porque tardar en sacar adelante una empresa o un proyecto acaba impactando en la competitividad de las pimes, y necesitamos más facilidad para crecer». También sería positivo «una mejor adaptación de los fondos Next Generation a nuestro tejido económico, formado en un 99,6% de casos por pimes, y no legislar con cantidades fuera de esta realidad».
Combatir la despoblación en el mundo rural, «reducir la morosidad de la administración y de las grandes empresas hacia las pequeñas y que se pague a tiempo» y «bajar la fiscalidad, que no suban impuestos y que tomen medidas que ayuden a fomentar la actividad económica», son otros planteamientos de Ciuraneta.
Por su parte, Mario Basora, presidente de la Cambra de Comerç de Reus, se centra fundamentalmente en la necesidad de culminar agravios históricos: «Cuando hablamos de infraestructuras, pedimos la Intermodal, Bellissens, acabar el Corredor, mejoras en la R15, el desdoblamiento de la N-420 y una lucha importante como también es la mejora de la C-14». Igual que el turismo, Basora pide «potenciar el aeropuerto de Reus, que este año sobrepasa el millón de pasajeros pero tiene un potencial de 2,5. Todo ello tiene que potenciar la intermodalidad en el territorio». Desde el punto de vista empresarial, el clamor también tiene que ver con «una simplificación administrativa y menos burocracia para acelerar los proyectos, fomentar la transformación digital y energética y el despliegue ágil y efectivo de los Next Generation».
Josep Maria Rovira, presidente de la Cambra de Comerç de Valls, reclama «que la R13 pase a formar parte de Rodalies, y por eso pedimos más frecuencias de tren con Barcelona».
La Cambra de Comerç de Tarragona se centra en un punto fundamental y consensuado históricamente en todo el territorio. «Nuestro interés es que se dé un impulso definitivo al Corredor del Mediterráneo que ayude a modernizar el país y a mejorar la competitividad de las empresas», explica la presidenta, Laura Roigé, que ayer estuvo precisamente en un evento en Madrid con más de 1.800 empresarios, en el marco del movimiento #QuieroCorredor.