El Joan XXIII contará con un hospital de día pediátrico en 2025
El nuevo servicio estará ubicado en la cuarta planta del edificio C y formará parte del futuro bloque Materno-infantil. El equipamiento atenderá a niños con tratamientos que no requieran de ingreso
El Hospital Joan XXIII de Tarragona tendrá un hospital de día pediátrico a partir del 2025. Estará ubicado en la cuarta planta del edificio C –el de Urgencias– y acogerá a aquellos niños y adolescentes enfermos que requieran de un tratamiento ambulatorio, sin necesidad de ingreso hospitalario.
Hasta ahora, estos pacientes eran atendidos en el hospital de día de adultos, o bien se veían obligados a quedarse ingresados, aunque no fuera necesario. Con la puesta en marcha del nuevo servicio, la vida de los pacientes más pequeños mejorará notablemente y permitirá tratar a los niños en un entorno más seguro, confortable y adaptado a sus necesidades. Al fin y al cabo, el objetivo es mejorar su experiencia durante la estancia hospitalaria.
Además, este nuevo hospitalpediátrico de día contará con dos gabinetes específicos de neumología y cardiología, y estará muy bien equipado a nivel de pruebas y de tratamientos de última generación.
Todo está preparado para que el nuevo servicio pueda entrar en funcionamiento entre el último trimestre del 2025 y el primero de 2026. «La obra está prácticamente terminada. Calculamos que durante el segundo trimestre de este año podremos tirar adelante los concursos para licitar el plan funcional y el equipamiento», explica David Edo, director de servicios generales del Institut Català de la Salut (ICS) Camp de Tarragona, quien añade que, a menudo, los trámites administrativos retrasan un poco los proyectos.
Las obras de este nuevo hospital pediátrico de día han costado 452.000 euros, sin contar el equipamiento y el plan funcional, que todavía están pendientes de licitación.
El nuevo servicio atenderá, sobre todo, a niños y adolescentes que requieran de tratamientos crónicos o de larga duración, pero que no sea necesario ingresar. Los pacientes vendrán a tratarse durante el día, pero por la noche podrán volver a sus casas a dormir, lo que les permitirá tener una vida más normal que si tuvieran que estar ingresados en el hospital.
No son muchos los centros catalanes que cuentan con este servicio. Es el caso de la Vall d’Hebron y del Arnau de Vilanova de Lleida. También, como no podía ser de otra manera, del Hospital Sant Joan de Déu. Ahora, el Joan XXIII se sumará a la lista. Cabe recordar que, con la reforma integral del complejo sanitario, el hospital busca ofrecer una cartera de servicios bien completa.
Nuevos paritorios
El nuevo hospital pediátrico de día formará parte de lo que se conocerá como el CORE Materno-infantil del futuro Hospital Joan XXIII. Para que nos entendamos, la dirección trabaja para que la cuarta planta del edificio C –el de Urgencias– se centre exclusivamente en servicios dirigidos a los niños y a las mujeres. De hecho, el proyecto está avanzado y ya se han ejecutado las primeras fases. Con esto, se ha conseguido liberar el espacio y concentrar todos los servicios de materno-infantil.
Actualmente, en esta cuarta planta, podemos encontrar una área de hospitalización pediátrica, y otra de hospitalización obstetricia, que ya están funcionando a pleno rendimiento. Además, también se ha concentrado la UCI Pediàtrica y la UCI de neonatos.
Ahora, los esfuerzos están puestos en los nuevos paritorios, ubicados justo al lado de las UCI, también en la cuarta planta. Hasta ahora, los paritorios estaban en la primera planta y era una de las partes más antiguas del hospital. Para hacernos una idea, estas salas de parto no se han remodelado desde el año 1989. Están totalmente obsoletas y su puesta a punto es de lo más necesario.
Con los nuevos paritorios, la paciente podrá llevar a cabo todo el proceso de dar a luz en el mismo espacio. De principio a fin en una sala. Y no como hasta ahora que tenían que ir moviéndose dependiendo de la etapa de parto. «Será un espacio mucho más humanizado y, en todos los casos, el padre podrá estar presente», dice Edo. Hasta ahora, el trabajo de dilatación se hacía en una sala y el de expulsión en otra. Se trata de un modelo antiguo, de los años 80. Con el paso de los años, los procesos cambian y, en este caso, el hospital quiere estar a la altura.
Casa de partos
Tanto es así que incluso se ha optado por hacer lo que se conoce como una casa de partos. Se trata de un mini apartamento de unos 30 metros cuadrados, con bañera, cocina e incluso cama de matrimonio –como si fuera un hogar–, que busca que el parto sea lo más natural posible. «La ventaja es que está en un ámbito hospitalario, que te da la seguridad de que, si hay un problema, la atención es inmediata», explica el director de servicios generales del ICS Camp de Tarragona, quien asegura que, actualmente, «hay una tendencia general de humanizar los procesos hospitalarios». Edo añade que «es una prestación muy demandada últimamente, y no tendría ningún sentido hacer un nuevo bloque materno-infantil sin este servicio».
El objetivo final, según explica Edo, es que en un plazo de diez años, el edificio C acoja aquellas unidades dirigidas a los más pequeños, mientras que el nuevo edificio CORE –que todavía no está construido y que debe actuar como edificio principal en el futuro Joan XXIII– se centre en hospital para adultos.