El Govern invertirá 6,7 M€ en la rehabilitación de viviendas públicas en Campclar
La intervención, que afectará a 23 edificios y 338 viviendas, consistirá en la mejora de la eficiencia energética de los bloques, ahora en un avanzado estado de deterioro
La Generalitat de Catalunya, a través de la Agència de l’Habitatge de Catalunya, invertirá un total de 6,7 millones de euros en la rehabilitación de edificios de vivienda pública en el barrio de Campclar. Los fondos se destinarán a bloques 100% de titularidad de la administración catalana, ya sea de la propia agencia o de Incasòl.
Este paquete de ayudas se ha anunciado después que el pasado viernes el Departament de Territori y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) firmaron un convenio con la aportación del Gobierno Central –a través de los fondos Next Generation– al programa de ayudas destinado a actuaciones de rehabilitación a nivel de barrios. Campclar forma parte de las trece promociones que se han incluido a nivel de Catalunya. Y, de hecho, de la suma final de 22,6 millones de euros que se han incluido en este paquete prácticamente una cuarta parte se destinará a este barrio.
En concreto, la subvención concedida asciende a 4,6 millones de euros, mientras que los otros 2,1 millones tendrá que aportarlos la Generalitat a través de fondos propios.
Según detalla la Agència de l’Habitatge de Catalunya, la actuación programada afectará a un total de 338 viviendas distribuidas en 23 bloques de las promociones conocidas como Francolí, Gaià y Sant Magí. «Prácticamente estamos hablando de la mitad de las escaleras, teniendo en cuenta que la cifra total es de 53, lo que pasa que en las otras la titularidad es mixta, ya que hay viviendas de propiedad privada, por lo que deberá actuarse a través de otra vía», apuntaban fuentes de la administración catalana.
Tras la firma del convenio entre ambas administraciones, el siguiente paso será la licitación de la redacción del proyecto.
Este detallará las actuaciones que se llevarán a cabo y que básicamente deben servir para mejorar el aislamiento térmico de los edificios para reducir su consumo energético, lo que en palabras llanas vendría a ser la colocación de un «abrigo» en los bloques para mejorar la eficiencia. Y esto afectará tanto las fachadas como las cubiertas y los porches de la planta baja.
Asimismo, también podría incluirse la sustitución de las ventanas.
El objetivo de todas estas medidas debe permitir alcanzar una reducción de entre el 30 y el 45% del consumo energético en estos bloques de viviendas, lo que permitiría que el 65% del gasto se financie a través de los fondos europeos. La parte restante tendría que asumirla la Generalitat con fondos propios.
Las obras todavía tardarán en poder iniciarse. Con la firma del convenio del pasado viernes se activaba la tramitación administrativa, que prácticamente podría alargarse un año. No obstante, según los plazos de los Next Generation a 30 de junio de 2026 los trabajos deberían estar acabados.
El Servei Municipal de l’Habitatge i Actuacions Urbanes SA (Smhausa) se felicitaba por esta aportación ya que «se actuará sobre una zona en la que es muy necesario, ya que está muy degradada». Asimismo, desde esta empresa pública se aseguraba que «ahora deberemos estar atentos en ver cómo aterriza y los calendarios». Y es que, desde hace meses se está trabajando para que a través de los fondos Next Generation haya una mejora del parque de viviendas existente en la ciudad.
Al respecto se hizo un mapa con los entornos residenciales de rehabilitación programada en el que además de la zona de Campclar y Torreforta también se incluyó el Eixample, Barris Marítims, Sant Pere i Sant Pau, Sant Salvador y Bonavista.
En estos se concentran la mayoría de las edificaciones construidas entre los años 1950 y 1980, con importantes déficits en cuanto a eficiencia energética.
En septiembre del año pasado se anunció que Tarragona había conseguido una partida de 8,2 millones de euros para dicho fin dirigidas a las comunidades de propietarios, con lo que, según la Generalitat, «Tarragona es una de las ciudades más beneficiadas».
Las ayudas deben permitir sufragar el 40% del coste de las obras, alcanzando el 100% en entornos vulnerables.
Hace unas semanas se abrió el periodo para el primer paquete de solicitudes, que corresponde a una suma de 4,2 millones de euros. Con todo, según los primeros cálculos se estima que podrían mejorarse las condiciones de eficiencia energética de cerca de 1.500 viviendas.
La administración catalana asegura que ha hablado con los colegios profesionales para buscar su apoyo en la ejecución de estos proyectos. Y es que, según los cálculos realizados, la movilización del conjunto de los recursos públicos destinados a dicho fin podrían suponer una inversión global de hasta 16,9 millones en la ciudad.