El Ayuntamiento de Tarragona activa este mes el plan para dejar la Rambla Nova y mudarse a la Plaça Imperial

El Ayuntamiento de Tarragona pone rumbo hacia el histórico edificio de Lletres. Tras años valorando ubicaciones como López Peláez, el entorno del Banco de España o un almacén de la Tabacalera, finalmente el consistorio ya ha tomado la decisión para dejar definitivamente el número 59 de la Rambla Nova: el inmueble municipal del futuro hub administrativo de la Plaça Imperial Tarraco.

Así lo confirman al Diari fuentes municipales, las cuales detallan que los técnicos del área de Territori ya han «cerrado» los pliegos técnicos y económicos para sacar este mes a concurso público la redacción del proyecto para rehabilitar el edificio, que en su conjunto cuenta con una superficie de 12.751 metros cuadrados.

Según el plan inversor diseñado por el gobierno municipal, la previsión hasta 2028 es la de destinar un montante global de 7,7 millones de euros para la reforma del inmueble: 700.000 euros en 2026 y 7 millones en 2028.

Esta inversión se amortizaría en aproximadamente una década, toda vez que actualmente el consistorio paga un alquiler de 600.000 euros al año por el edificio que usa en la Rambla Nova desde el año 2004, a raíz de unos 50.000 euros mensuales. En la actualidad, la administración municipal tiene allí un total de 34 servicios, con unos 200 trabajadores, en un recinto que cuenta con una superficie de 3.100 metros cuadrados entre sus ocho plantas de altura.

De 15 a 18 meses de obras

Hace años, el Ayuntamiento comunicó a la propiedad del edificio (Famurba SL) que no ejecutaría la opción de compra acordada en el año 2002, que asciende a ocho millones de euros. Por ello, ahora el gobierno local ha puesto en marcha el mecanismo para llevar a cabo el traslado a medio plazo.

De momento, fuentes municipales indican que ya se ha llevado a cabo la «definición» de las características que deben tener las nuevas oficinas, así como una primera propuesta de ocupaciones de los servicios municipales. A la vez, se han definido los «criterios arquitectónicos» y de «sostenibilidad». También se ha realizado «un escaneo con láser interior, dron exterior y topografía».

El planning se dividirá en tres fases. En la primera se invita a «profesionales que acrediten solvencia técnica» a participar en el proceso. En la segunda se seleccionarán 5 propuestas, que pasarán a la tercera, en la que un jurado formado por técnicos «independientes» propondrá al consistorio cual es la mejor propuesta.

Todo ello e ejecutará entre este diciembre y agosto del 2025. Posteriormente, el plazo previsto para la redacción del proyecto ejecutivo tardaría «unos 8 meses», mientras que las obras tardarían, como mínimo, «entre 15 y 18 meses».

«Estamos en el inicio del proceso. El proyecto definitivo acabará de marcar qué departamentos y cuantos trabajadores se trasladarán a la Plaça Imperial Tarraco», indica el concejal responsable del Àrea de Territori, Nacho García (PSC), quien avanza que el objetivo del gabinete socialista es trasladar a Lletres «a gran parte de los empleados que ahora están en la Rambla Nova».

Aval de Junts y PP

Junts per Catalunya y Partit Popular son las dos formaciones que apoyan más decididamente el futuro traslado. «El alquiler de la Rambla Nova es un despropósito. El año pasado ya acordamos con el gobierno del PSC una partida de 65.000 euros para iniciar los trámites y, además, ya tenemos el compromiso inversor para ir a la Plaça Imperial», indica el portavoz juntaire, Jordi Sendra.

Por su parte, Maria Mercè Martorell (PP) recuerda que su partido ya ha propuesta «en varias ocasiones» el traslado. «Permitirá un ahorro anual muy importante, además de poder ubicar las nuevas oficinas en un punto neurálgico de la ciudad, con una gran centralidad administrativa», añade Martorell en relación al también próximo traslado de la Diputació al antiguo edificio de Caixa Tarragona.

ERC preferiría la Tabacalera

Esquerra se muestra más fría con el cambio. «El traslado es prioritario. El lugar más interesante sería un almacén de la Tabacalera para dinamizar el entorno con una suma de apuestas públicas», indica el concejal Xavier Puig. El edil republicano indica que «si se tira adelante la opción de la Plaça Imperial, lo que pedimos es que se cumpla el acuerdo del presupuesto de este 2024 para ubicar en Lletres un centro cívico y cultural».

Finalmente, Jordi Collado (ECP) califica como de «sinsentido» el actual alquiler, que es «herencia del gobierno convergente liderado en urbanismo y patrimonio municipal por Jordi Sendra». Asimismo, el representante progresista pone también sobre la mesa el solar vacío de la Rambla Vella para ampliar el consistorio, «cuyas obras nos saldrían más baratas», resalta pese a que el Pla Lletres ya empieza a caminar.