Después de 62km, el agua de Sant Magí ya está en Tarragona
La ciudadanía salió en masa. Un año más las calles de la ciudad se llenarón para recibir a los portants, carruajes y caballos. En el Portal del Carro se formaron largas colas para comprar los botijos con el agua miraculosa
El agua de Sant Magí ya está en Tarragona. Después de 62 kilómetros, los portants llegaron a la ermita del Portal del Carro. Estaban agotados pero también ilusionados y con la emoción a flor de piel.
Portants, carruajes y caballos pasaron la noche del viernes a les Fonts de la Brufaganya. Fue precisamente en ese lugar donde los presentes pudieron disfrutar del Ball Pla de Sant Magí, protagonizado por el Esbart Dansaire de Tarragona, la entidad invitada de este año.
«Estamos muy contentos y emocionados. La verdad es que nos han acogido como si fuéramos uno más y esto se agradece», explicaban Neus Rabascall, Cristina Sabaté y César Guzmán miembros del Esbart Dansaire de Tarragona. Eso sí, los tres reconocían que «el camino se había hecho muy duro porque el calor se hacía notar, pero que los vecinos y vecinas de los pueblos por los que habían pasado les había hecho el camino más ameno».
Rabascall, Sabaté y Guzmán estaban de acuerdo en que eran unos afortunados, ya que «se trata de una experiencia única y es una oportunidad que no la tienes cada día». Ahora ya pueden decir alto y claro que han participado de esta tradición y gracias a ello conocen de primera mano como baja el agua hasta Tarragona.
Si para estos tres jóvenes, esta era su primera vez, lo cierto es que la mayoría de los portants son unos veteranos. Es el caso de la Mireia Mohedano. Es grallera, acompaña los Portants y esta ha sido su decimosexta bajada. No ha fallado ningún año y para ella es un día muy especial que siempre ha vivido intensamente.
«Es una experiencia muy bonita. Nosotros somos los encargados de abrir la comitiva y cada vez que llegamos a un pueblo, tocamos algunas canciones. Da gusto ver como nos reciben y poder compartir camino con la familia de los Portats, explica Mohedano».
Los protagonistas se levantaron el sábado a primera hora de la mañana en un paisaje idílico dispuestos a empezar la tradicional Baixada del agua de Sant Magí.
Después de recorrer Santa Perpètua de Gaià, Querol y el Pont d’Armentera, llegaron a Santes Creus dónde pararon a comer para reponer fuerzas. «Nos hemos levantado esta mañana a quince grados, hacía fresquito y se ha agradecido. Después es cierto que ha subido la temperatura, pero ha sido fácil de llevar. Ha habido años que ha hecho más calor», afirma Sergi Baches, el coordinador dels Portants de l’Aigua. Después de Santes Creus, los siete carruajes y los portants retomaron el camino en dirección a Vila-rodona dónde pasaron la noche.
Este domingo, vigilia de Sant Magí, empezaron a andar temprano y después de pasar por Bràfim, Nulles, l’Argilaga, La Secuita y Els Pallaresos el agua de Sant Magí llegó a Tarragona dónde una vez más la ciudadanía salió en masa por las calles.
La 31a Baixada fue realmente especial para Carles García Blaya y Carles García Prado de ‘Cal Murciano’. Padre e hijo consiguieron salir por primera vez con su carruaje, capitaneado por Bombi. «Tenemos la finca en el Catllar. Somos la cuarta generación y este año hemos participado por primera vez en la bajada. Nos ha parecido muy bonito el recorrido a pesar del calor. El hecho de compartirlo con mi hijo lo ha hecho todavía más especial», explica García. Alrededor de las siete de la tarde los portants llegaron a la plaça de la Font. Allí les esperaba el Magí de les Timbales, els Negritos, los Gegants Moros, los Gegants Vells, los Nanos Vells, los Nanos Nous, el Ball de Bastons de l’Esbart Santa Tecla y la Banda Unió Musical de Tarragona. Quince minutos después, empezaron el tradicional recorrido todos juntos. Una vez todos los participantes llegaron a la altura del Consell Comarcal, las cuatro collas de la ciudad alzaron un pilar. Finalmente, los portants llegaron con el agua en el Portal del Carro. Allí se formaron largas colas para comprar los botijos con el agua miraculosa. Muchos aprovecharon la ocasión para visitar la capilla de Sant Magí. Ahora, la ciudad ya se prepara para el día de su patrón. Este lunes por el mediodía tendrá lugar la tradicional Diada Castellera en la Plaça de les Cols y por la tarde l’Anada a Professó amb el Seguici de Sant Magí. Alrededor de las ocho y media Sant Magí volverá a entrar en su capilla.