Lara Pujadas: «Empecé de friegaplatos, fue duro, pero descubrí mi vocación»

La joven, natural de La Ràpita pero que vive en Xerta, trabaja en Villa Retiro, que cuenta con una Estrella Michelin. Lara ganó el prestigioso premio Lladonosa. Fue la mejor entre 30 alumnos y alumnas de escuelas culinarias catalanas

Lara Pujadas tiene el sueño de montar un restaurante con estilo propio. Pero hasta que se cumpla sabe que le toca trabajar y aprender. Empezó en el fregadero de un restaurante y este año recibió un prestigioso galardón.

Felicidades por ganar el premio Lladonosa.

Gracias. Estoy muy agradecida con los premios por darme tanto en tan poco. Ha sido una locura.

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¿Que significó para ti?

Un cambio a mejor, un empujón para que te vean y te conozcan, y un reconocimiento al trabajo, al esfuerzo y a la disciplina que adquieres en años. No te das cuenta hasta que te llega algo así.

¿Por qué te premiaron?

El objetivo principal del concurso siempre ha sido elaborar aperitivos donde el ingrediente principal es el AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra) de Les Borges Blanques, que es un producto difícil de trabajar en la cocina.

¿Qué delicia cocinaste?

Un aperitivo en la semi y otro diferente en la final. Los platos principales fueron en la semi uno estipulado que era el pollastre de pota blava amb cargols y en la final un arroz de libre elección. El mío fue un arroz de gamba roja, presa ibérica y jamón ibérico.

Me está entrando hambre, la verdad. Sigamos con la entrevista. ¿Por qué te gusta tanto la cocina?

Yo empecé en un restaurante arrocero en la ‘pica’, fregando platos. Fue bastante duro con 16 años, pero descubrí mi vocación y lo que quería ser. Enseguida me espabilé para aprender, e ir progresando. Es un oficio que te enseña que, si te lo propones, llegas donde quieres llegar. Con esfuerzo obviamente.

Exacto. La restauración es un trabajo sacrificado: muchas horas, mil detalles... Y estar pendiente de si tu plato le gusta al cliente.

Se trata de un trabajo muy pasional. No estás por tener un gran sueldo o un gran reconocimiento. Creo que una persona a la que no le gustara de verdad no podría aguantar.

Acabas el máster en Villa Retiro. ¿Qué quieres hacer a partir de ahora?

Me quedo un tiempo trabajando aquí, y luego a ver más sitios de nivel, donde pueda seguir aprendiendo de todos. Me gustaría también estudiar otras culturas gastronómicas, técnicas y personas.

¿Te gustaría abrir un restaurante?

Sí, la verdad. Creo que a casi todos los que amamos esto nos gustaría tener algo propio, con tu sello y tu personalidad. Aunque aún está lejos, me gustaría viajar, aprender y, sobre todo, ahorrar.

¿Cuál es tu tipo favorito de cocina?

Nuestra comida es una locura, y más en España en que la verdad es que tenemos una variedad increíble de productos autóctonos que debemos explotar. Me encantan muchas otras cocinas como la peruana, la italiana y la japonesa.

¿Y el plato que más te gusta?

Es muy difícil decirte un plato en concreto porque hay muchísimos que me encantan, pero uno de ellos podría ser un plato de canelones tradicionales con bechamel y gratinados, la mítica receta que todos guardamos.

¿Tienes algún cocinero o cocinera preferido/a ¿Algún modelo a seguir?

Sí. Obviamente hay muchísimos cocineros a los que admiro. Una de mis referentes desde hace muchos años es Carme Ruscalleda.

¿Qué opinas de los programas de cocina?

Depende del programa pero suelen ser muy interesantes programas como Chef Table. Y otros tantos documentales sobre trayectorias de gente que ha luchado por la cocina.