Amnistiadas tres personas por agredir a un edil por una estelada

La Audiencia Provincial aplica dicha ley al entender que «tiene que servir para superar las tensiones» y unir puentes entre las instituciones estatales y una parte de la población

Tres personas acusadas de haber agredido a un teniente de alcalde en 2017, al que consideraron responsable de la colocación de una bandera independentista delante del domicilio de los procesados, han sido absueltos por la Audiencia Provincial de Tarragona, que les ha aplicado la Ley de Amnistía, tal como había pedido el abogado defensor. Los tres acusados se enfrentaban a cinco años de prisión, que pedía la acusación particular, mientras que la Fiscalía solicitaba tres. En su auto, las tres magistradas entienden que los actos se enmarcan dentro de los recogidos por la Ley de Amnistía, de la que destacan que tiene que servir para superar las tensiones y eliminar algunas circunstancias que provocan la desafección que mantiene alejada de las instituciones estatales a una parte de la población».

Los hechos se remontan a la una y media de la tarde del 22 de diciembre de 2017, según argumentaba la acusación. La procesada, al llegar a su domicilio, comprobó que cerca habían colgado una bandera estelada, que había sido retirada días antes con motivo de las elecciones celebradas el día anterior a los hechos. Ante ello, llamó a la alcaldesa para pedirle que acudiera al domicilio, que su marido estaba muy nervioso y que quería enfrentarse con el teniente de alcalde Xavier Anguela, el concejal encargado de dar este tipo de instrucciones.

La alcaldesa Núria Manchado contestó que no podía ir a casa de la encausada y que calmara a su marido. Manchado llamó a Anguela para preguntarle qué había pasado con la bandera y para advertirle de que el hombre estaba muy alterado. En aquel momento alguien llamó a la puerta de la víctima y la comunicación se cortó.

Una vez llegados los acusados al domicilio del teniente de alcalde, llamaron a la puerta. Les abrió la víctima. Le recriminaron –relata la acusación– la colocación de la mencionada bandera. Se abalanzaron sobre el perjudicado, que cayó al suelo. Uno de los procesados lo cogió por el cuello y le presionó con el brazo, mientras otro procesado le cogía las piernas para inmovilizarlo y la investigada le clavaba las uñas en la cara.

En ese momento, la esposa de la víctima, alertada por la ausencia de su marido, salió fuera de casa y les dijo que pararan, por lo que los agresores depusieron su actitud.

El juicio

Durante la vista oral, celebrada el pasado 11 de junio –el mismo de la entrada en vigor de la Ley de Amnistía–, el abogado defensor, Òscar Cabrero, manifestó ante las magistradas que el caso cabía dentro de los supuestos de la ley. El fiscal dijo que lo tenían que estudiar, al igual que la acusación particular.

Ahora, la Sala ha dado la razón a la defensa. En el auto, las magistradas recuerdan que el proceso independentista comportó «una tensión institucional que dio lugar a la intervención de la Justicia, y una tensión social y política que provocó la desafección de una parte sustancial de la sociedad catalana hacia las instituciones estatales, que todavía no ha desaparecido y que es reavivada de forma recurrente cuando se manifiestan las múltiples consecuencias legales que siguen teniendo, especialmente en el ámbito penal». Y añaden que precisamente el objetivo de la ley pasa «por finalizar la ejecución de las condenas y los procesos judiciales que afectan a todas las personas sin excepción, que participaron en el proceso independentista».