Adriana Paz: De vender bolsos en Bonavista a triunfar en el Festival de Cannes
La actriz mexicana vivió una temporada en Tarragona y llegó a probar suerte en PortAventura antes del despegue de su carrera en el cine
La última edición del Festival de Cannes pasó a la historia al coronar a las cuatro actrices protagonistas de la película Emilia Pérez con el premio a mejor actriz. Una de ellas, Adriana Paz, se convirtió en la primera actriz mexicana en recibir este galardón. Un premio a toda una vida dedicada a la interpretación que no ha sido un camino fácil y que tiene en Tarragona un punto de partida crucial.
Así lo ha explicado ella misma en una entrevista que le han hecho este sábado en el programa Via Lliure de RAC1. «Viví hace 20 años en Tarragona y Barcelona», ha contado. «Tenía 23 años, acababa de terminar la carrera y me enamoré de un catalán. Esa relación no funcionó, pero me quedé porque me gustaba mucho Catalunya».
Aquí, empezó a tomar clases de danza en el Estudi de Dansa Montserrat de Tarragona, donde conserva muchas amistades y llegó a hacer una gira por España bailando charlestón. Además, trabajó de animadora en varios hoteles de Salou y buscó hacer sus pinitos en PortAventura, pero la rechazaron, tal y como ha contado en la radio.
«Lo intenté pero no me aceptaron», ha dicho, al mismo tiempo que se ha declarado fan del parque de atracciones de la Costa Daurada. «Me encantaba también el mar y el Balcó del Mediterrani», ha dicho.
«Me divertía mucho», ha recordado emocionada, «aprendí mucho, me encantaba la montaña, el mar y la fideuá». No obstante, también fue una época muy dura para ella. Al principio, su situación era irregular y uno de sus primeros trabajos fue vendiendo bolsos en el mercado de Bonavista, ha relatado.
Mientras vivía en Catalunya, además, Adriana fue víctima de violencia machista. «O termino muerta o termino en la cárcel, porque lo voy a matar yo», llegó a pensar. Gracias al apoyo de sus amigas logró salir de esa situación y romper con esa pareja.
«Mis sueños se han cumplido, aunque no siempre haya sido fácil. Eso es lo bonito y lo que te construye. Sin esa experiencia de Catalunya no sé quién sería hoy», ha señalado la actriz, nominada a un premio Goya por la película El Autor (2017).