Una vecina de Tortosa paga 500 euros para suspender el examen de conducir
La mujer llevaba un dispositivo de cámara oculta que fue interceptado por los Mossos. No podrá examinarse de nuevo hasta pasar un plazo de seis meses
Una vecina de Tortosa de 32 años años fue denunciada a finales de septiembre por intentar hacer trampas en el examen teórico del carnet de conducir.
Llevaba incorporado debajo de una camisa negra un sistema de cámara oculta y de telefonía móvil con la intención de que una tercera persona viera el examen y le cantara las respuestas correctas durante la prueba.
Los hechos ocurrían en el examen convocado al mediodía del viernes 27 de septiembre.
Una patrulla del Àrea Regional de Trànsit Terres de l’Ebre descubrió a una de las personas que se presentaban en el examen en Tortosa que llevaba a cabo un uso fraudulento de un dispositivo móvil para sacar provecho y aprobar el examen.
La patrulla se fijó en los movimientos extraños que realizaba la participante y prestó mayor atención porque las sospechas de que se ayudaba de una tercera persona para responder al cuestionario iba creciendo. Y cuando estaba muy claro de que algo raro se cocía, los agentes intervinieron.
Los policías autonómicos pidieron que saliera la mujer de la sala y una vez fuera de la misma, le encontraron un dispositivo de cámara y de telefonía móvil debajo de la ropa.
Con él estaba en contacto (mediante auriculares) con una tercera persona. Con el uso de la cámara oculta, la person que se examinaba le iba enseñando las preguntas para que esta cómplice pudiera darle la respuesta acertada desde la distancia.
Con la localización del dispositivo, automáticamente la estudiante quedó suspendida de la prueba y además se le aplicó una prohibición de medio año para volver a presentarse. El hecho irregular, además, comporta el pago de 500 euros para ella y otros 500 para la cómplice.