Los Mossos d’Esquadra desmantelan una red de tráfico de marihuana en Catalunya: 7 detenidos, 35.000 euros y 1.469 plantas incautadas

Los Mossos d’Esquadra, en colaboración con la Policía Nacional Francesa, han desmantelado una importante red internacional de tráfico de marihuana que operaba entre España y Francia. La operación, que tuvo lugar el pasado 3 de diciembre en la comarca del Alt Empordà, se saldó con la detención de siete personas, todas ellas hombres con edades comprendidas entre los 33 y los 48 años. Según fuentes policiales, los detenidos están acusados de pertenencia a organización criminal, delito contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y tenencia ilícita de armas de fuego.

La investigación se inició en abril de este año, cuando la Policía Nacional Francesa detectó el flujo de marihuana desde España hasta Marsella. Este hallazgo permitió el inicio de una operación conjunta entre las fuerzas policiales de ambos países. Durante los meses siguientes, los investigadores identificaron a varios integrantes de la red y sus movimientos entre ambos territorios.

El momento clave de la operación se produjo en junio, cuando la Policía francesa llevó a cabo un dispositivo para detener a varios de los implicados. Sin embargo, tres de ellos lograron huir hacia Cataluña. Estos individuos, que formaban parte de un mismo grupo familiar, desempeñaban un papel crucial en la organización, ya que se encargaban de la logística, los contactos con los proveedores y la organización de los envíos de marihuana.

A partir de aquí, los Mossos d’Esquadra intensificaron la investigación, logrando vincular a los fugitivos con ocho domicilios ubicados en Figueres y Llers. La fiscalía de Marsella emitió tres órdenes europeas de detención y una orden europea de investigación, permitiendo a los juzgados de Figueres autorizar el registro simultáneo de las viviendas. El 3 de diciembre, se ejecutó la acción policial de forma coordinada.

El operativo contó con la participación de unidades especializadas de los Mossos, incluidas la Unidad de Investigación de Figueres, la Brigada Móvil, la Unidad Canina, la Unidad de Drones y la Unidad Central de Helicópteros. En total, se realizaron ocho entradas simultáneas en domicilios de Figueres y Llers, lográndose la detención de los siete implicados, entre ellos, los tres fugitivos buscados por la Policía francesa.

Durante los registros, los Mossos desmantelaron tres plantaciones de marihuana en interiores, una de las cuales se encontraba oculta en un búnker subterráneo de unos 60 metros cuadrados en la localidad de Llers. Este búnker, según informó la policía, estaba camuflado bajo tierra, simulando una zona de cultivo en la superficie. Todas las plantaciones estaban conectadas ilegalmente a la red eléctrica para alimentar los sistemas de iluminación y ventilación necesarios para el cultivo.

El balance de la operación fue significativo. Se incautaron cerca de siete kilos de cogollos de marihuana, unas 1.469 plantas entre esquejes y ramas, así como varias dosis de hachís listas para la venta. También se intervinieron tres armas de fuego cortas, munición, armas eléctricas, joyas, relojes de alta gama y más de 35.000 euros en efectivo. Asimismo, se hallaron balanzas de precisión, herramienta habitual en la preparación de las dosis de droga para su distribución.

Los tres detenidos con órdenes europeas de detención y entrega fueron trasladados a Madrid para comparecer ante la Audiencia Nacional los días 4 y 5 de diciembre. Los otros cuatro arrestados comparecieron ante el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Figueres, donde se determinará su situación judicial.

Esta operación ha supuesto un duro golpe para la red internacional de tráfico de marihuana que operaba entre España y Francia, dejando al descubierto el sofisticado sistema logístico que utilizaban para ocultar sus actividades delictivas. Los Mossos d’Esquadra continúan con las investigaciones para identificar a otros posibles implicados y determinar el alcance total de la red.