Un grupo de trabajo prevendrá casos de violencia vicaria en Reus
El Pla Feminista municipal estudiará también implantar paradas de bus a demanda de noche, dará pie a un mapa de puntos negros de inseguridad y tratará el maltrato en mujeres mayores
El Ayuntamiento de Reus se dotará de un grupo de trabajo de prevención, sensibilización e intervención en violencia vicaria, la instrumentalización de los hijos de mujeres víctimas de violencia machista para hacer daño a la madre. Así lo prevé el nuevo Pla Municipal de Polítiques Feministes 2023-2026, aprobado el viernes en Junta de Govern y cuyo contenido ha podido consultar el Diari.
El documento atiende también al abordaje de la violencia obstétrica, el maltrato a mujeres mayores y los matrimonios forzados. E instará a la implantación de paradas de bus a demanda por la noche y a elaborar un mapa de puntos negros en la ciudad.
Preguntada sobre los avances sociales que puede comportar el nuevo plan –el quinto de este tipo que confecciona el consistorio–, la concejala de Participació, Montserrat Flores, indica que «el trabajo de los últimos años y el proceso participativo que llevamos a cabo para redactarlo permitió detectar puntos concretos, focos como la cuestión de la violencia vicaria». El grupo de trabajo que incida en este tema «contará con la participación de profesionales, pero también con personas de la sociedad civil. Se trata de tener elementos de prevención y de tratamiento», señala Flores, que especifica que «se hará en estrecha alianza con el grupo de violencias de Benestar Social».
El Pla de Polítiques Feministes «incluye ahora un despliegue más amplio de tipos de violencias machistas» porque «hay ámbitos en los que esta aún era más tabú, incluso por vergüenza propia, y no se hablaba. El de la gente mayor es un ejemplo de esto», concreta la concejala.
Justamente por eso, uno de los principales objetivos es, «antes que nada, insistir en la sensibilización, contarlo y decir que eso pasa. Es lo que sirve para que las víctimas vean que lo que les ocurre no es aceptable y, además, no es su culpa. Y resulta útil, también, para que haya pistas que posibiliten la detección y la actuación».
«En la violencia, es importantísimo que la persona denuncie», subraya Flores. Sobre la intervención, afina que «tal vez sí que podremos armar algún grupo de acompañamiento mutuo en el que exponer las situaciones y sentirse acompañadas, más allá del Servei d’Informació i Atenció a les Dones».
En cuanto a las paradas de bus a demanda en horario nocturno, la responsable de Participació explica que «ya se había hablado antes de esto y guarda relación con el urbanismo feminista: por desgracia, hay momentos en que la ciudad no es segura para todos, y especialmente para las mujeres; y, a veces, eso pasa en ciertos espacios, a ciertas horas y en ciertas situaciones». «Cuando una persona baja del bus tarde, puede ser vulnerable», detalla Flores, que comenta que «se ha planteado, y en otros lugares ya se hace, que se pueda pedir que el bus pare en otro sitio, dar la opción de hacer bus a demanda en términos de seguridad».
«Si esta sociedad no fuese machista y no hubiese hombres dispuestos a agredir a las mujeres, medidas así no serían necesarias. Pero, de momento, son estas cosas provisionales que hay que hacer», valora la concejala.
El consistorio quiere centrarse también en el trabajo sistemático con alumnos de Educación Primaria, a edades tempranas, considerando que «aspectos del rol hombre-mujer se empiezan a analizar de forma distinta». Igualmente «es importante avanzar en las empresas y explicar las ventajas de que hombres y mujeres tengan el mismo reconocimiento, que no lo tienen».
La diagnosis previa realizada para conocer la realidad actual de la población reusense permitió identificar diferencias derivadas de la Covid, que «ha desencadenado un escenario donde las tecnologías de la comunicación, el individualismo y la necesidad de relacionarse cambiaron». Ese análisis fue beneficioso para ver aspectos a mejorar respecto al anterior plan en cuanto a recursos y personal, difusión, incorporación de nuevos colectivos vulnerables, empoderamiento de hombres, implicación de entidades y apertura a campos como la salud o el deporte.
Otras acciones que desencadenará el Pla Municipal de Polítiques Feministes 2023-2023 son: espacio para hombres feministas y grupos de autoayuda para hombres, creación de una escuela popular de saberes feministas, ampliar la sensibilización en entornos juveniles, implicar a dirigentes de entidades cívicas, talleres de corresponsabilidad en el hogar, designar responsables de igualdad en grandes eventos, involucrar a agentes de ocio nocturno en dinámicas de seguridad, un distintivo de establecimientos libres de violencias sexuales, difusión de las aportaciones de la mujer a la sociedad, introducir la perspectiva de género en eventos deportivos y en la salud, grupos de apoyo para la salud mental de las madres, redacción de un plan de usos del tiempo de la ciudad, marchas exploratorias sobre necesidades sociales.
Referentes de diversidad sexual y de género en la calle
La semana pasada también recibió el ‘ok’ el segundo Pla Municipal de Polítiques de Diversitats Sexuals i de Gèneres. Este incluye, entre sus acciones, la aplicación de la visión de géneros en el urbanismo, la incorporación de personas referentes en el nomenclátor, la implementación de un programa de coeducación en perspectiva LGTBI+, la recogida de información sobre el acoso escolar o la prevención de agresiones LGTBI-fóbicas.
El documento también contempla la formación sobre diversidad sexual en el deporte y en la salud, así como la creación de un punto de asesoramiento psicológico LGTBI+.