Reus vive el Carnaval con disfraces de superhéroes, la Tronada de Ricomà y las Olimpiadas
En la Rua de Lluïment, los reusenses han sacado sus mejores galas, con algunas carrozas críticas y otras propuestas más clásicas. Tampoco ha faltado un Twingo rodeado de culés
Disfraces, confeti y, sobre todo, mucha fiesta. Reus está cumpliendo al pie de la letra el mandato de la Reina Carnestoltes, que en el pregón del jueves invitó a «pecar para que reine la alegría». Y es que «con excesos y juerga viviremos toda la semana», exclamó hace escasos días. Y eso es lo que están haciendo los reusenses: dejar a un lado la formalidad del día a día y salir a la calle sin vergüenza.
Esta tarde, las 41 carrozas participantes han arrancado la Rua de Lluïment desde la plaza de la Pastoreta, siguiendo por el Passeig Prim, Sunyer, han dado la vuelta en la plaza del Nen de les Oques y hasta llegar al Passeig Misericòrdia. La mayoría de carrozas eran totalmente desenfadadas, pero también había que hacían referencia a cuestiones de actualidad. Entre ellas, un Renault Twingo rodeada de culés con un reloj Casio colgando del cuello, en referencia a la canción que Shakira ha dedicado a Gerard Piqué.
A nivel municipal, una colla reprocha que el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, encendiera la Tronada del 28 de junio, de Sant Pere. Iban vestidos de amarillo, con la bandera de Tarragona en la espalda y luciendo paraguas amarillos. En la carroza había una alerta a navegantes: «Que un pelacanyes encienda la Tronada, sanción de 5.000 euros». El cartel era del mismo formato que los que el Ayuntamiento de Reus ha colgado en puntos de la ciudad próximos a locales de ocio, recordando la sanción de orinar en la vía pública.
Tampoco ha faltado el toque olímpico, con un disfraz complicado de identificar, especialmente para los nacidos después de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. No obstante, también era difícil para los que vivieron los juegos en primera persona. Lo fácil habría sido vestirse de Cobi, pero no, buscaron el detalle y se disfrazaron con chaqueta de leopardo, barretina, camisa blanca, faja roja y pantalones negros. Hacían referencia al centenar de músicos que, en el espectáculo de clausura de los juegos, interpretaron la banda sonora del momento en el que la mascota olímpica desaparecía volando en un barco de papel. Adivinarlo era realmente para sacar un sobresaliente, pero sí que daban algunas pistas: en lo alto de carroza había un Cobi con su barco. La idea era rememorar los 30 años del Barcelona 92’. El año pasado no fue posible, todavía por la pandemia, pero esta vez ya no ha habido excusa.
Entre los más pequeños han triunfado, una vez más, los disfraces de superhéroes y princesas, siendo Elsa –de Frozen– la favorita. Personajes de cuentos infantiles tampoco han fallado, como la Caperucita y el lobo, u otros disfraces que nunca pueden faltar en Carnaval, como los jugadores de rugby, mimos, payasos o bomberos.
La Covid ha pasado factura. Esta vez hay nueve colles menos que en la última edición, la de 2020, justo antes del confinamiento. El motivo ha sido la pandemia, dejando a muchos sin capacidad económica suficiente. Y es que también cabe recordar que hay colles que invirtieron en la renovación y homologación de sus carrozas, pero no han podido salir en dos años y no se han recuperado.
Con todo, al final han sido 41 las comparsas participantes, y no solo hay menos carrozas, sino que, en muchos casos, hay también menos inscritos. Así también lo denunció la Reina Carnestoltes durante el pregón del jueves, diciendo que echa en falta a gente, «quizá por las ITV que hay que pasar anualmente».
Los actos siguen este domingo con la Rua Matinal. Empezará a las 11.15 h desde la avenida de la Salle y seguirá por la plaza de la Pastoreta, calle Misericòrdia, arrabal de Robuster, de Sant Pere, del Pallol, plaza de Catalunya, calle del Doctor Robert, de La Selva del Camp, Amargura, plaza del Pintor Fortuny hasta Passeig Sunyer y terminando delante de la Biblioteca Central Xavier Amorós. Será en este punto donde habrá Ball Vermut a partir de las 13 h y, a las tres del mediodía, comida de las ‘colles’ carnavaleras. Con las pilas ya cargadas, a partir de las seis de la tarde, la fiesta se trasladará al Passeig Mata, con la Batalla de Confeti. La previsión es que se alargue hasta las 20 h para, media hora más tarde, dar inicio al Ball de Vespre en la plaza del Mercadal.
A quien todavía le queden fuerzas tras un fin de semana demoledor, lunes tendrá una cita en la plaza de Prim, donde un año más se celebrará Expo-Profit, la Fira Catalana de la Consumició. Las ‘colles’ carnavaleras ofrecerán todo tipo de comida a partir de las nueve de la mañana.