Negocios del Carrilet de Reus dicen sí al cambio del sur, pero piden más luz y limpieza
Los comercios solicitan que el Ayuntamiento les informe en persona de los detalles de la futura transformación
Comercios del barrio del Carrilet de Reus valoran positivamente la futura transformación de la zona sur –al haber ya recreaciones que permitan visualizar el cambio– aunque algunos admiten tener algunas reservas al no haber sido informados en persona por el Ayuntamiento sobre algunos de los detalles y los tiempos en que se hará todo. A propósito de la transformación, piden que se priorice iluminar más ciertas vías, como la calle Escultor Rocamora, y que haya más limpieza. Factores como la iluminación allí, de hecho, es algo que contempla el anteproyecto.
Los ámbitos más próximos a modificarse –enmarcados estos en la fase 1 de la transformación y cuyo inicio previsto de las obras sería, según dijo la alcaldesa, Sandra Guaita, el pasado julio, enero de 2026– serán el edificio del Mercat del Carrilet y su entorno. En el caso de dicho entorno, se corresponde a la ya mencionada calle de Escultor Rocamora, que será peatonalizada, y al cruce que tiene ésta con la avenida de Pere el Cerimoniós, que será pacificado al tráfico. La avenida, eso sí, conservará su función, únicamente se eliminará el ‘efecto rotona’ actual.
¿Hace falta el cambio?
«Toda mejora siempre es bienvenida, aunque nos gustaría saber un poco más, que nos vengan a informar y nos cuenten por qué es importante esta transformación, ¿hace falta? Habrá a quien le beneficie y a quien no», razona, por ejemplo, Jose Luís González, copropietario de la tienda de ropa Qnk en la avenida del Carrilet. El comerciante rememora los inicios de la tienda, «casi 40 años atrás», habiendo visto las obras del aparcamiento subterráneo de la avenida. «En su momento, esas obras fueron duraderas, pero han supuesto un cambio para bien, porque para nosotros es poder aparcar cerca del trabajo». Llevan mucho en el Carrilet y han visto cambiar la zona, «especialmente en el aspecto comercial». Esperan que la transformación «sea para bien» y «nos traiga a más gente», declara. También admite que, puestos a cambiar cosas, «sería interesante que los edificios de los alrededores de la avenida que no tengan uso, se les dé uno».
En la calle Escultor Rocamora, y también con trayectoria de alrededor de ocho años, se encuentra la tienda de ropa femenina Butis Ropa y Complementos, desde la que su copropietaria, M.ª José Giménez, opina que si este cambio «nos trae más gente, mejor», y si eso «se une dar incentivos para que en esta calle se abran más negocios, sería de ayuda». El Mercat del Carrilet y la estación de autobuses, por otro lado, «nos da vida» y la estación, precisamente, los convierte en la puerta de entrada para visitantes y turistas, «y alguno pasa por aquí». El traslado de la estación de autobuses que se proyecta hacia el Parc de Mas Iglesias, tercia Giménez, no sabe si puede afectarles a nivel comercial.
«Todo se verá, a ver cuándo se produce el cambio, porque el secreto de estar al pie del cañón después de tantos años aquí es que el local es nuestro, si tuviéramos que pagar un alquiler, no hubiéramos sobrevivido», acota Giménez, quien asegura que tienen una clientela de barrio afianzada, así como venidas de otros municipios como Prades, incluso El Vendrell y de la costa, como Salou y La Pineda. Por su parte, la titular de la Farmàcia del Carrilet, Lucía Conde, de la segunda generación al frente del negocio familiar (situado en el cruce entre la calle Escultor Rocamora y la avenida de Pere El Cerimoniós), dice observar la transformación «en positivo». Y es que apunta que todo lo que se pueda hacer por el barrio es «necesario», porque «está bastante abandonado y la gente, muy desengañada, lo vemos tras el mostrador, con clientela de hace 40 años». Y es que «mi madre abrió en el 1976».
Para ellos, como farmacia, los puntos «prioritarios» son «tener más luz, porque da seguridad, y más limpieza, pues tenemos los contenedores cerca y casi siempre hay suciedad y bolsas fuera del contenedor. Es clave, y más al ser un establecimiento sanitario», apunta. Conde también destaca que el hecho de que se cree un entorno más amable en la calle Escultor Rocamora «puede traer beneficios, porque hay mucha vida, tanto en las terrazas cercanas, las de la avenida, como gente que se reúne en la calle».