Las entidades de Reus cooperan para fortalecerse después de la pandemia

Ante la dificultad de vías de financiación y haber perdido masa social por la llegada de la Covid, asociaciones de todo tipo colaboran con convenios y compartiendo espacio

Las entidades de la ciudad siguen ayudándose las unas a las otras para fortalecerse tras la Covid, ya sea a través de convenios o compartiendo espacios. «Estamos en activo desde hace 30 años; el club no surgió como tal, sino que fue a raíz del impulso de la asociación de padres y madres de entonces, del Centre d’Educació Especial Alba de Reus; al acabar la etapa allí, nos establecimos como club y nos federamos», resume la presidenta del Club Esportiu Alba, Rosa Planelles.

A día de hoy, son 30 miembros. «Tenemos gente de 25 años y de 50, con diferentes tipos de discapacidad y practican diferentes deportes. Principalmente, entrenan natación, atletismo y baloncesto de septiembre a junio», añade. Acogen a personas de Reus, la comarca y de los alrededores. «No ponemos límite territorial», expone.

Gracias al convenio firmado con el Club Tennis Taula Ganxets hace unos años, «han practicado el ping-pong y se atrevieron con vela, gracias a la colaboración con el Club Nàutic de Cambrils, que esperamos renovar tras la pausa por la Covid». Permanecieron activos también entonces y con algunos deportes: «Con grupos burbuja y medidas de seguridad». El esquí y las rutas con raquetas de nieve, por otro lado, son actividades que han realizado a lo largo de su trayectoria de forma puntual. «También participamos en eventos de la ciudad como los Tres Tombs o en caminatas populares», declara.

Espacio para actividades

Por otro lado, el Centre d’Amics de Reus (CAR) y la Colla Gegantera de Reus acordaron recientemente sumar esfuerzos. Según expusieron ambas entidades, la Colla Gegantera usará la sede del CAR para sus actividades, reuniones, dejar material y ‘gegants’, realizar encuentros, talleres, etc. El presidente del CAR, Joan Mª Mallafrè, celebró «el buen entendimiento» al que llegaron y que todo ello «supone una ganancia para las dos entidades».

La presidenta de la Colla Gegantera de Reus, Astrid Martín, destacó «el buen recibimiento por parte del CAR desde el primer momento». Hizo hincapié en que ahora se podría trabajar creando sinergias: «Además, los ‘gegants’ tendrán una sede más visible para los ciudadanos, puesto que da al arrabal de Robuster, a pie de calle».

La voluntad es que los ‘gegants’ dinamicen la sede del CAR con una serie de actividades y también utilicen el bar que, en los próximos meses, se pondrá en marcha en los bajos del CAR.

Por otro lado, el presidente de la Germandat de Sant Isidre i Santa Llúcia de Reus Josep Mª Vallès, expresa que «en la sede del arrabal de Robuster acogemos a diferentes entidades como el Esbart de Sant Llúcia, una de fotografía, cuatro compañías de teatro, una de yoga y una coral». Dice, también, que Les Artistes Locales organizan sus clases teatrales durante el curso allí y «contamos con la programación teatral en nuestro auditorio, lugar en el que últimamente se acogen numerosas fiestas de final de curso de institutos y otras organizaciones, que requieren de proyector e incluso el escenario y cambios de luz».

Así, dice, se ayudan de forma colectiva. «El auditorio es una fuente de ingresos para nosotros, nos ayuda a pagar las facturas como la de la luz, que ha subido». Señala que han recuperado actos fijos que no tenían desde la aparición de la Covid. «El bar de la entidad también es una salida para los asistentes a los actos que se realizan y este Sant Pere volvimos a realizar los desayunos de tenedor», celebra. Apunta, también, que han solicitado su incorporación a la Filmoteca de Catalunya de cara a la próxima temporada.

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