La odisea de aparcar en el Hospital Sant Joan de Reus
Usuarios y empleados tienen dificultades para estacionar porque, por las mañanas, se colapsa. Además, este año ha subido el precio de la zona azul y del parking subterráneo
La imagen de coches aparcados por los descampados de los alrededores del Hospital Sant Joan de Reus ha desaparecido en los últimos años. El entorno se ha ido ordenando, con la creación del área de zona azul, a finales de 2019, y el cierre de los descampados con barreras de hormigón y bolardos. Pero las dificultades para aparcar en la zona siguen presentes y, además, estacionar es ahora más caro: desde enero, el parking subterráneo vale 4,5 euros al día (50 céntimos más que el año pasado); y la zona azul, 3 euros diarios (un euro más).
«Mucha gente acaba aparcando en Sant Josep Obrer para, precisamente, evitar pagar», expone una usuaria. Así también lo confirman desde el barrio. Eduardo Navas, al frente de la asociación vecinal Primer de Maig, comenta que por las mañanas las calles se llenan de coches de gente que va al hospital. No obstante, asegura que no hay problemas, «porque a esas horas, los vecinos están trabajando». Lo que sí genera esto es que haya un volumen importante de gente que cruza la avenida de Bellissens, y algunos optan por hacerlo entre medianas, generando situaciones de peligro.
Pasan unos minutos de las 10 de la mañana y el parking de zona azul hace rato que está al completo. Al ser más económico que el parking subterráneo, la gente prioriza estacionar en superficie, pero rápido se llena. A esas horas, tampoco quedan plazas de motos. Pero una usuaria tiene suerte y encuentra un hueco en la avenida de la Universitat. Mientras se saca el casco explica que suele ir en moto «precisamente por los problemas que hay para aparcar» y también «por un tema económico, antes había el descampado, pero ahora es todo de pago».
Esperanza, otra usuaria, se queja de los precios. Pero también de que se tenga que pagar al mediodía. «En el resto de zonas azules de la ciudad, de 13 a 16 h no se paga, y aquí es de 08 a 20 h. No lo entiendo, no venimos a pasar el rato ni a ir de compras y no podemos estar pendientes del coche», denuncia, además de remarcar que «han subido el precio».
La zona azul del hospital cuenta con más de 300 plazas y abrió en diciembre de 2019 con un precio máximo de 2 euros/día. Así se ha mantenido durante cuatro años, pero desde el pasado 1 de enero el precio es de 3 euros diarios. Pero aun estando dispuestos a pagar, «es difícil encontrar plaza, sobre todo por las mañanas», señala otra usuaria, que relata que «he estado a punto de dejar el coche en la universidad».
Dificultades entre empleados
Los usuarios no son los únicos que encuentran dificultades para llegar al Hospital Sant Joan de Reus. Los empleados tampoco lo tienen fácil, y así lo pone de manifiesto Dori Balmaseda, desde CCOO.
En la zona de urgencias, hay un parking para los trabajadores, pero éste suele llenarse rápidamente «y a veces han habido actos vandálicos», dice. Por otro lado, relata que los empleados que ya trabajaban en el antiguo hospital (en la calle Sant Joan) tienen descuento para aparcar en el parking subterráneo. Pero «los que ya entraron a trabajar en el nuevo edificio tienen que pagar los 67 euros mensuales que cuesta el abono», especifica. Cuenta que otros empleados usan el parking de zona azul, «y hay quienes van a la zona del Decathlon», para evitar pagar.
Por todo ello, Balmaseda explica que reclaman más facilidades para que los empleados lleguen a su puesto de trabajo, ya sea a nivel de parking, como en transporte público o en bici. «Reclamamos al Ayuntamiento una estación de la Ganxeta», especifica. Una demanda que, en principio, tendría que quedar cubierta en los próximos meses. Y es que la idea del consistorio es poner una estación en la zona, ligada a la futura nueva estación de Bellissens.
Barrios sin bus directo al centro hospitalario
Las líneas de bus L20, L21 y L60 son las que dan servicio al Hospital Universitari Sant Joan de Reus. Las dos primeras unen el barrio Immaculada con el centro hospitalario, tanto entre semana como en fin de semana, pasando por Països Catalans, zona de paseos, Oques, Pere el Cerimoniós, avenida Sant Jordi y Sant Josep Obrer. En cuanto a la L60, solo está activa de lunes a viernes y va de la plaza del Nen de les Oques al hospital. Parte importante de la ciudad queda cubierta, pero hay barrios que quedan colgados y necesitan hacer transbordo. Es el caso de, por ejemplo, el barrio Gaudí, o todo el eje de la avenida de Salou. «Se intentó poner un bus directo, pero duró pocos meses. Lo usaban pocos vecinos», recuerda el presidente del barrio Montserrat, Domingo Martínez.