El PSC gana con soltura en Reus y Puigdemont amarra el núcleo y el norte
Los socialistas arrebatan a Junts+ la zona entre Mas Vilanova y el Carme, dominan en 7 de los 10 distritos y vencen por primera vez en la ciudad. ERC, que se impuso en 2021, cae al tercer puesto con Vox y PP pisándole los talones
Con 10.661 votos (26,17%), hasta 3.807 más que en los comicios de 2021 y a 2.440 del segundo puesto de Junts+, el PSC se impuso contundente este 12M en Reus, por primera vez en la historia.
Los de Salvador Illa crecieron y conquistaron 7 de los 10 distritos, uno más que entonces. Y en los otros 3, que se mantienen en manos de los juntaires –8.221 papeletas, el 20,18%–, la formación socialista fue segunda fuerza. ERC, que había ganado hace tres años, cayó cerca de 8 puntos y terminó tercera.
La capital del Baix Camp resultó ser uno de los grandes municipios con mayor incremento de participación: subió un 8,85%, por encima del 6,66% de la circunscripción, y 41.053 personas acudieron a las urnas.
El PSC venció con solvencia en toda la ciudad salvo en el núcleo antiguo y el entorno del Mercat Central; la parte de Ample, Poetes, Niloga, Gaudí, Sant Jordi y Mineta; y las urbanizaciones Sant Joan y El Pinar, que continúan siendo de los de Carles Puigdemont. Los socialistas obtuvieron sus mejores datos –un 31,94%– en la zona de los barrios Fortuny, Pastoreta, Monestirs, Misericòrdia y Carrilet.
El número 2 del PSC por Tarragona, el reusense Alberto Bondesio, valoró el día después que «hemos conseguido unos resultados históricos». «La ciudadanía nos ha dado su confianza porque nuestro proyecto es el único que puede volver a situar a Catalunya en su liderazgo a nivel estatal y europeo, y también por la gestión de la alcaldesa y su equipo en Reus», añadió. Y destacó que «ahora queremos pasar página de 10 años de parálisis y agotamiento».
Junts+, por su parte, logró amarrar el núcleo y el norte, puntos con menos inmigración y mayor poder adquisitivo. Pero perdió una de las 4 áreas que había dominado en las anteriores elecciones al Parlament, el distrito 2, que abarca de Mas Vilanova a Mare Molas, Sardana, el Carme y parte del ámbito del Escorxador, y que se tiñó de rojo.
ERC, que venía de llevarse el premio en las últimas autonómicas a base de copar la segunda posición en los 10 distritos, perdió a 1.736 votantes, se quedó en 5.210 y acabó con Vox y PP pisándole los talones, con 5.076 y 4.928 apoyos respectivamente. El partido republicano cosechó sus peores cifras –10,68%– en Juroca, Lladoners y Montserrat.
Al margen de PSC y Junts+, Vox y PP fueron las otras dos formaciones que incrementaron registros. Los de Ignacio Garriga, cuartos en el cómputo global de Reus, se colocaron como segunda fuerza en los tres grandes distritos del suroeste y alcanzaron prácticamente un 20% de incidencia en los alrededores de Sant Josep Obrer.
Y el Partido Popular, quinto, cuajó la progresión más destacada: se embolsó 4.928 votos que le elevaron 7,62 puntos sobre 2021. En el distrito 10, Jardins de Reus y Mas Carpa, la marca de Alejandro Fernández quedó segunda en empate con Junts+. Comuns Sumar se conservó estable.
A la CUP se le escaparon casi una cuarta parte de las papeletas de 2021, más de 3 puntos, lo que le llevó a caer a la sexta plaza, tras Vox y PP. Aliança per Catalunya irrumpió con 1.589, el 3,90%. Obtuvo su máxima penetración en el distrito 10 y estableció su techo de votos –401– en el norte. Tras ERC, la debacle más acusada fue de Cs, que se dejó por el camino 1.639 apoyos y recibió 267.