Así será la transformación del barrio del Carrilet de Reus

Un Mercat del Carrilet más diáfano, con aparcamiento y ganando altura con una planta más es la principal novedad

La apuesta del gobierno municipal de transformar la zona sur de Reus sigue su curso y el «punto inicial», ha recordado este martes 23 de julio la alcaldesa de Reus, Sandra Guaita, «es el Mercat del Carrilet, que ha actuado como una mancha de aceite, extendiéndose hacia sus alrededores, y con cuya vecindad nos hemos ido reuniendo para informar de cómo será en un principio».

Quien liderará el cambio del sur –cantidad económica global que aún no ha sido cuantificada por la administración local al ser «pronto todavía»– es la empresa Comas i Pont, equipo de arquitectos que ya luce en su web sus rénder de cómo se configurará todo. La transformación al completo será una realidad más allá del presente mandato. Por lo pronto, se tramitará el proyecto del Mercat del Carrilet con la modificación puntual del planeamiento urbanístico, así como del entorno urbanístico más inmediato con los proyectos básico y ejecutivo. «Ahora tenemos previstos para los proyectos básico y ejecutivo unos 875.000 euros, que es presupuesto de 2025».

«Nuestra intención es generar dinamismo económico, nueva actividad económica en la zona sur, que se convierta en un polo de atracción económica», ha añadido Guaita. De hecho, ha mencionado cuatro fases de transformación, que luego la concejala de Urbanisme, describiría como «ámbitos». De hecho, estos no serán cronológicos no consecutivos y, en algunos casos sus agendas dependerán de otras administraciones, como la Generalitat (en el caso de la reubicación de la estación de autobuses).

La primera de las fases o ámbito pertenece a la remodelación del Mercat del Carrilet, que se modernizará y tendrá aparcamiento, siendo este, en palabras de la alcaldesa, «un equipamiento del siglo XXI, junto con dotación de varios servicios municipales», cuya naturaleza aún no ha trascendido.

«No esperamos que entren máquinas por las futuras obras hasta, al menos, enero de 2026», ha acotado Guaita. «El objetivo es que el mercado sea un espacio diáfano (véase uno de los rénders donde se muestra el futuro espacio), en el que pasen cosas y queremos potenciar la movilidad de la ciudadanía en su interior; y, crecerá en altura, puesto que el mercado tendrá una planta nueva, hasta llegar a los 8.400 metros cuadrados de superficie útil», ha declarado.

Imagen de cómo será el Mercat del Carrilet según el anteproyecto, que ha ido a cargo de Comas i Pont. Foto: © Graph Visual Studio

Un segundo ámbito de la transformación será el de la estación de autobuses, que será semisoterrada, y como ya se anunció, se desplazará hacia el Parc de Mas Iglesias, entre el parque y la Escola Eduard Toda, generando «una mayor conectividad». «La agenda de su evolución dependerá, en este caso, de la Generalitat, que es quien tiene la competencia», ha recordado Guaita.

La amplitud de espacio que se gane al resituar la estación de buses, permitirá acoger el edificio bautizado como Belvedere, que pertenecería a un tercer ámbito (puede verse la configuración del mapa del artículo) y «acogerá vivienda de urgencia, ya sea para mujeres víctimas de violencia machista o necesidades puntuales que se tengan derivadas de Serveis Socials, no servirá para absorber necesidad del Centre Social El Roser». En el espacio que quede también habrá zona verde. En este sentido y como diría más adelante la concejala de Urbanisme, Marina Berasategui, se acogerá el llamado edificio Pérgola, que será «un espacio de bienvenida para la ciudadanía, con un edificio de planta baja, y será como si Mas Iglesias llegara hasta el Mercat Central». De esta forma, ha dicho la edil, «se percibirá el espacio unificado». De hecho, Pérgola acogerá espacios de atención al público, se plantean, por ejemplo, una oficina de turismo y de servicios de movilidad.

Berasategui ha declarado, por otro lado, que «la transformación quiere ser una mejora para el barrio, que generará un impacto para el territorio a nivel de movilidad, ya que se da continuidad al eje sur, que conectará con la estación de tren del norte y la de Bellissens, al quedar la estación de buses más cerca». El proyecto, además, «no conecta solo con Mas Iglesias sino también con viales como el de Escultor Rocamora y el de Lluís Mas i Ossó, en los que habrá pacificación y circulación controlada y transformación urbana, con lo que habrá una menor presencia del coche». Sobre el edificio Belvedere, Berasategui ha expresado que «responde a la demanda del proceso participativo y será una alternativa habitacional».

Xavier Villacampa, director Serveis Territorials de Territori de la Generalitat de Catalunya, a su vez, ha incidido en los cambios que habrá con la estación de buses: «La estación concebida en forma de cruz minimiza el impacto visual que tiene a día de hoy, aportando más luz y será un polo intermodal, con la estación de Bellissens, el futuro tranvía y la estación de trenes del norte, sin olvidar las estaciones de la Ganxeta, potenciando una movilidad activa». En definitiva, destacó, «haciendo que Reus esté mejor conectada con el Camp de Tarragona y su área de influencia».

Las paradistas

En cuanto al futuro de las paradistas, quienes firmaron la prórroga de los contratos de arrendamiento de paradas el pasado 4 de julio, se ha recordado que tienen continuidad en el equipamiento, aunque, según Guaita, «aún estamos trabajando en ver cuál será el lugar en el que se reubicarán durante las obras». Por lo que se refiere a la nave en la que, en el mandato anterior, se reubicaría el Mercat del Carrilet (todo ello antes de que, en el actual mandato, se cancelara el querer resituarlo), «aún estamos trabajando qué haremos con el espacio», ha confirmado Guaita.

Por su parte, la portavoz de las paradistas, Maria Jesús Querol, ha expresado a los medios que «lo que nos han enseñado desde el Ayuntamiento nos ha gustado, modernizar el mercado es algo que pedíamos desde hace tiempo, pues nos habíamos quedado obsoletos y eso afectaba a nuestra actividad comercial». Sobre posibles nuevos lugares en los que trabajar mientras haya obras, Querol cuenta que «aún no hemos empezado a hablar de ello, no sabemos dónde será, pero estamos más tranquilas desde que firmamos el contrato de prórroga».

(Seguirá ampliación)