Felicidades
A un servidor le gustaría empezar esta ‘plumillita’ deseando un feliz santo a todas las Marías, pero sin olvidarse de una en especial: la ‘yaya’ María, que aún sigue dando guerra hoy a sus 88 años. Los abuelos son únicos y no hay nada más feliz que aprovecharlos cuando están. No por ser una frase mil veces repetida deja de ser una gran verdad. Los ‘yayos’ son experiencia, son sabiduría, son conocimiento, son historias de vida y son mucho más de lo que podamos imaginar. Son un amor sincero, puro, que siempre está ahí. Son dos veces padres.
Los abuelos deberían ser eternos, sí, pero, lamentablemente, la vida no es de color de rosa y la mejor eternidad es cuidarlos mientras están, para así devolverles una ínfima parte de todo lo que han hecho por nosotros. Así que felicidades, ‘yaya’, espero que podamos celebrar muchos más juntos.