¿Fin de la pandemia?
El domingo el presidente estadounidense, Joe Biden, aseguró en un programa de televisión que «la pandemia de Covid se ha terminado». Y se quedó tan ancho. No lo debe de creer así nuestro Gobierno, que mantiene un tira y afloja con algunas comunidades autónomas que han solicitado acabar con la obligatoriedad de la mascarilla en el transporte público.
Algo que, ciertamente, no tiene mucho sentido cuando se puede ir sin el tapabocas en los conciertos, en los masificados actos de Santa Tecla o en el por fin útil –después de cuatro años de espera– Palau d’Esports de Tarragona, lleno hasta la bandera estos días por una humanidad aglomerada que jaleaba, gritaba, suspiraba... sin mascarilla.
Y eso que me temo que el coronavirus aún no nos ha abandonado del todo. Lo sabe bien la reina Margarita II de Dinamarca, quien, a sus 82 años, ha dado positivo después de asistir el pasado lunes al funeral de Isabel II de Inglaterra, al que acudió en compañía de su hijo, el príncipe heredero Federico, en representación de su país. Fue un acto en el que estuvieron más de 500 jefes de Estado y dignatarios de todo el mundo, incluidos miembros de las principales casas reales –imaginen la que se puede liar si al virus le da por expandirse por tan ilustres cuerpos–.
También se hallaba allí el propio Biden. Esperemos que no sea uno de los contagiados, lo que le obligaría a rectificar sus palabras. Y no sería precisamente la primera vez. Aunque en esta ocasión a todos nos gustaría creerle.