Illa gana las elecciones y noquea a la Catalunya independentista
Victoria histórica del PSC. Los socialistas suman 42 escaños –nueve más que en 2021– y su líder se postula como único candidato para ser el 133 Presidente de la Generalitat. La pregunta ahora es: ¿Quién será su compañero de viaje?
Los mejores resultados de la historia. En Tarragona y en Catalunya. El PSC gana las elecciones al Parlament e Illa es el único candidato con opciones reales para ser escogido Presidente de la Generalitat. La clave es ahora saber quién será el compañero de viaje de los socialistas. El escenario más viable pasaría por un tripartito con PSC, ERC y los Comuns. Una opción que tiene como principal obstáculo el omnipresente Hard Rock. La alternativa –aunque menos verosímil– sería un pacto entre el partido ganador y el de Puigdemont. Todavía hay partido. La gobernabilidad queda en el aire. Lo único cierto es que Illa ha conseguido noquear al independentismo en Catalunya y que repetir las elecciones no sería cosa rara.
El PSC ha sido el claro ganador de la noche. Ha conseguido casi 870.000 votos y ha logrado 42 escaños, nueve más que en los comicios de 2021. Pese a ello, el tono contenido de Salvador Illa durante su comparecencia ha avistado la difícil tarea de formar gobierno. Podríamos decir que no era el más feliz del lugar. Ha repetido hasta cinco veces las palabras nueva etapa y ha mostrado su voluntad de ser el 133 Presidente de la Generalitat. «Catalunya se pone en marcha, se pone a funcionar. Y lo hará para todos los catalanes, vivan donde vivan, piensen como piensen y vengan de donde vengan. Ningún catalán se quedará fuera de esta etapa que hoy abrimos», ha dicho Illa, quien ha tardado ná y menos en atribuir el triunfo a las políticas de su jefe Pedro Sánchez.
Euforia en Ramón y Cajal
La cara de prudencia del líder socialista poco tiene que ver con la euforia desatada que se ha vivido en la sede tarraconense del PSC. «Visca, visca, visca, Tarragona és socialista!», han gritado. Y es que no era para menos. Por primera vez en la historia, el partido socialista ha conseguido seis escaños en la circunscripción de Tarragona, dos más que en los comicios de 2021. Solo obtuvo estos resultados en 1999, pero, en ese caso, el PSC se presentaba aquí junto con la ya desaparecida Iniciativa.
La noche en la sede de Ramón y Cajal ha empezaba con la llegada de los apoderados. Sus rostros demostraban que la cosa había ido bien. «¡Hemos ganado en la Part Alta!», decía uno. «¡Y en Sant Salvador!», añadía otro. La cosa pintaba muy, pero que muy bien. Tanto que, alguno, en tono de broma, soltaba: «¡Nos tendrán que ampliar el Parlament para nosotros. Jajaja!».
Con la candidata Rosa Maria Ibarra concentrada en una habitación a puerta cerrada, aparecían en escena y entre aplausos Ivana Martínez y Alberto Bondesio. Ambos, en los puestos altos de la lista de Ibarra, y ambos, militantes del PSC con una trayectoria de más de veinte años. Empezaron en el partido cuando todavía eran unos adolescentes y ahora, casi dos décadas después, dan el paso definitivo. «¡Ya les tocaba!», decían algunos de los presentes, mientras Martínez y Bondesio se fundían en un abrazo interminable. Alguna lagrimilla también se les escapaba.
A parte de ellos, a la lista de nuevos diputados por Tarragona se añade el alcalde de Batea, Joaquim Paladella, el primer teniente de alcalde del Vendrell, Christian Soriano, y la senienca Lídia Ferré.
Con casi el cien por cien escrutado, llegaba la aparición estelar de la candidata Rosa Maria Ibarra. Con ella, la euforia, la fiesta, la locura. La sede de Ramón y Cajal, llena a reventar, explotaba de alegría. «La ciudadanía de Catalunya quería pasar página. Tenía ganas de abrir otra etapa, más positiva, que deje atrás los bloqueos», decía emocionada Ibarra, quien añadía que «esperamos que, a partir de aquí, podamos articular un posible gobierno que nos lleve realmente a dar este paso». Con el histórico triunfo socialista, se abre ahora un nuevo escenario político que marcará los próximos cuatro años.