La energía positiva

Mostrar la energía nuclear y el funcionamiento de las centrales de una forma amena y rigurosa, objetivo de la Associació Nuclear Ascó-Vandellòs II

Centro de información. Hace 13 años abrió las puertas el centro de información de ANAV, situado en el emplazamiento de la central nuclear de Ascó y por el que han pasado desde entonces cerca de 30.000 visitantes, la mayoría estudiantes de escuelas e institutos, pero también grupos organizados y familias.

Más de la mitad de la electricidad que se consume en Catalunya la generan desde hace más de 30 años las centrales nucleares de Ascó y Vandellòs II. Pero la energía de origen nuclear no sólo es una gran desconocida para buena parte de la población, sino que también arrastra un importante estigma social. Para romper con estas barreras, la Associació Nuclear Ascó-Vandellòs II (ANAV), gestora de las tres plantas en funcionamiento en la provincia de Tarragona, cuenta con un centro de información en el emplazamiento de Ascó por el que han pasado cerca de 30.000 personas desde 2011; y más recientemente ha puesto en marcha la iniciativa ‘Ciencia Positiva’: una serie de cápsulas audiovisuales divulgativas concebidas para saltar las barreras de los prejuicios y ofrecer a una ancha franja de público conocimiento de primera mano sobre física nuclear y el funcionamiento de las centrales, de una manera amena, desenfadada y próxima.

El encargado de acercar y hacer entendibles conceptos como fisión nuclear, turbina, radiactividad o uranio, es el director de servicios técnicos de ANAV, Ferran Tarrassa, todo un apasionado de la divulgación. Este ingeniero mecánico, ingeniero industrial y de técnicas energéticas, doctor en Ingeniería Industrial por la Universitat Politécnica de Catalunya (UPC), se enfunda en divertidas camisetas con la ciencia como protagonista para presentar dinámicos clips de unos cinco a ocho minutos de duración. La iniciativa nació en 2020, por el cierre temporal del centro de información de Ascó a raíz de la pandemia de la Covid-19 y la imposibilidad de desempeñar su papel de herramienta estratégica de divulgación y conocimiento.

Equipado con más de 30 módulos interactivos, este centro de información de ANAV en la central de Ascó cuenta con una reproducción del centro de control, material actual y antiguo de trabajo; ropa de seguridad que se pueden probar los visitantes, cámaras térmicas que dejan constancia del calor emitido por las personas y todo tipo de maquetas y simulaciones del funcionamiento de una planta nuclear como la de la Ribera d’Ebre.

Así, se ofrece la posibilidad de aprender a través de la experimentación de una manera lúdica y divertida, convirtiéndolo en una propuesta muy interesante para todas las edades. Desde los más pequeños, que aprenderán aspectos fundamentales sobre la energía y cómo se genera, a los mayores, que podrán encontrar entre sus contenidos información sobre temas específicos, relacionados con la generación nuclear o las estrictas medidas de seguridad que hay en el interior de las plantas.

De esta manera, las visitas se adaptan a públicos de todas las edades y perfiles: estudiantes de secundaria y bachillerato, universitarios, colectivos, entidades sociales o incluso familias.

Experiencia

Entre los visitantes más recientes están los alumnos de bachillerato científico del Instituto Caparrella de Lleida.

Antes de poder experimentar en los diferentes módulos, los estudiantes estuvieron atentos a una extensa explicación sobre los fundamentos de la energía nuclear y la producción de electricidad, así como el funcionamiento de Ascó I y II; y sobre todas las partes de la central, desde el centro de emergencias hasta los dos reactores, con datos curiosos sobre el uranio o la gran torre de refrigeración, que se encarga de enfriar el agua del Ebre que se utiliza en la planta antes de devolverla al río, con un máximo de temperatura autorizada para no dañar el medio ambiente.

El profesor Lluís Companys explica que se trata de una visita de las que realizan a lo largo del curso para ver la aplicación real de algunas de las materias que estudian. «Des esta manera pueden ver de primera mano cuál es el funcionamiento, la producción y las aplicaciones de contenidos que vemos de forma más teórica en las clases».

Carme Cortassa y Nerea Dolcet, estudiantes de 16 años, experimentaron con los diferentes elementos y se sorprendieron con algunos de los datos y explicaciones dadas por Miquel Biarnés, el encargado de la visita al centro. «Hemos subido a una bicicleta en la que, a través de los pedales y diferentes manivelas, hemos podido experimentar con la generación de energía y iluminar una columna», comentaron.

Montse Godall, jefa de Comunicación y Relaciones Externas de ANAV, explica que dan una gran importancia al conocimiento y la divulgación. «Lo que hacemos es técnicamente complejo, un mundo relativamente desconocido... por eso es muy importante hacer divulgación, de forma rigurosa pero también amena».