El peón que cada día se va a casa habiendo aprendido algo nuevo
Aleix es la tercera generación en su familia que se dedica al mundo de la construcción. Él es peón, algo que le apasiona desde pequeño
Hay una frase que reza: «No te irás nunca a dormir sin haber aprendido algo nuevo». Seguro que en muchas ocasiones a todos ustedes les ha venido a la cabeza. Pero apuesto a que no cada día. Quizá en algún momento en que se han sorprendido por saber algo nuevo curioso o extraño. Pero esto no sucede a diario, ¿me equivoco? Pues hay alguien que me llevaría la contraria. Se llama Aleix Prats, tiene 21 años y trabaja como peón especialista en la empresa constructora Garcia Riera. Aleix no titubea en absoluto cuando afirma que «cada día, cuando termino de trabajar, salgo por la puerta sintiendo que he aprendido algo nuevo». Es más, es precisamente esto lo que más motiva a este joven peón a acudir a su puesto de trabajo.
Sin embargo, para Aleix el mundo de la construcción no es nuevo. «Lo he vivido siempre en casa», explica, tanto que él es el ‘heredero’ de una generación de empleados de la obra que comenzó con su abuelo, quien fue encargado, y prosiguió con su padre, actualmente jefe de obra. Él no podía ser menos y aquí está, siguiendo sus pasos porque, además, «toda la vida he querido dedicarme a esto. Lo tenía clarísimo desde bien pequeño».
Tan claro lo tenía que la construcción no es solo un trabajo para Aleix. Se ha convertido en su pasión. ¡Qué agraciado! No lo digo yo, lo dice él: «Siento, literalmente, pasión por la construcción». El porqué es muy sencillo: «Siempre me ha resultado muy curioso y atrayente el ver cómo se alza un edificio de la nada. Me llama especialmente la atención ver cómo, de un plano, de un ‘simple’ papel, se termina haciendo realidad lo que allí se refleja».
Esta realidad se va plasmando día a día con las tareas que ejerce Aleix, y se enorgullece porque «hago de todo. Ayudar a un operario u oficial, limpiar, echar una mano a un encargado, llevar a cabo pequeñas reparaciones, repasos...». Además, explica, «siempre que ayudas a un oficial o a un operario, aprendes algo. Por ejemplo, a replantear una pared o un pilar. Se trata de coger una medida del plano y marcarla en la realidad, en el sitio donde se va a construir eso en concreto, para que el oficial o el operario pueda hacer el trabajo».
Faltan oficios
Así como Aleix, con sólo 21 años, tenía claro desde niño a qué quería dedicarse, reconoce que muchos de sus compañeros, con su edad, todavía no lo saben. Él los anima: «Que aprendan un oficio, el que sea, pero un oficio porque es algo que creo que se está perdiendo y es una lástima». «Dentro de unos años ya no habrá ni paletas, ni electricistas, ni lampistas», lamenta. Así que si por él fuera, no habría duda: «¿Mi recomendación? El oficio de la construcción, ¡claramente! Pero es algo que te tiene que gustar».
Por todo esto, uno de los sueños de Aleix es poder construirse su propia casa. «Me encantaría», admite, pero «es muy dificil, por no decir imposible, hacerlo solo». No pasa nada, seguro que algún conocido se encandila por este trabajo y le echa una mano.
El perfil
- Nombre Aleix Prats Rivas
- Edad 21 años
- Ocupación Peón especialista en Garcia Riera empresa constructora
- Años de experiencia 20 meses
- Banda salarial: Entre 22.000 y 26.000 euros brutos al año
Qué hay que estudiar
Aleix Prats dejó los estudios de Bachillerato para estudiar un grado medio y poder ejercer de peón en la construcción. En el Martí Franqués se puede cursar la formación específica de oficio de prevención de riesgos laborales. Además, actualmente, Alex cursa un grado superior de proyectos de edificación.