De la máquina de escribir mecánica al Business Intelligence
Ramon Bergadà, en Reus, cumple 80 años adaptada al cambio constante
En sus 80 años de historia desde su fundación en Reus, en 1942, por Ramon Bergadà Perelló, la empresa Ramon Bergadà Mecanització d’Oficines SL ha asistido a no pocos cambios tecnológicos. Desde las primeras fotocopiadoras al nacimiento de la informática, el telefax o los primeros PC, pasando por la invención de Internet y, más tarde, el Big Data o la Inteligencia Artificial.
Literalmente, esta empresa de servicios y equipamiento de oficina, orientada a empresas y particulares, ha pasado de reparar máquinas de escribir mecánicas de principios del siglo XX a proporcionar analítica financiera y comercial de KPI (Key Performance Indicators o ‘indicadores clave de rendimiento’) mediante herramientas de Business Intelligence.
El análisis de datos es la última incorporación a este negocio familiar, que alcanza ya la tercera generación tras ocho décadas de actividad. Lo explica Joan Maria Bergadà, gerente y administrador: «A principios de año decidimos montar un departamento de Business Intelligence (BI), con un profesional dedicado exclusivamente a ello, donde trabajamos con los datos que cada cliente tiene en su ERP (Enterprise Resource Planning) y, en base a sus KPI, analizamos las necesidades que tiene tanto a nivel comercial como financiero».
Un ERP es un tipo de software que las empresas utilizan para gestionar de manera integrada todas sus áreas de actividad, desde la contabilidad hasta la cadena de suministro. De ahí se extraen datos para su análisis mediante plataformas y herramientas BI que permitan luego tomar decisiones informadas. Es el famoso Big Data. También Small Data.
En el caso de Ramon Bergadà, la plataforma elegida ha sido Microsoft Power BI, que utilizan para «leer los datos y montar todos los informes que quiera el cliente sobre su empresa, con una cantidad de información en línea brutal», explica Joan Maria Bergadà. «Por ejemplo -prosigue-, que puedan tener un informe comparativo en línea con los últimos tres o cuatro años de artículos concretos, donde se indique qué clientes los han comprado, cuántas unidades, en qué época del año y qué beneficio ha dado cada operación».
«Esto -añade-, para una empresa a partir de cuatro trabajadores, ayuda a tomar decisiones de manera muy rápida. Hasta ahora se exportaban datos hacia Excel, algo tan complejo que mucha gente no lo utiliza. Aquí, con una simple lectura pueden verlo y tomar decisiones».
«Se trata -explica- de un departamento con una proyección de crecimiento exponencial, que este 2022 puede tener más crecimiento que cualquier otro de los que tenemos». Aunque no es, ni mucho menos, el único. Con una facturación de 1,5 millones de euros en 2021, de los cuales un 70% procedieron de empresas y otro 30% de particulares (la mayoría, en su punto de venta al público en el centro de Reus), los servicios de mantenimiento y reparación de material de oficina, con talleres propios, siguen siendo una parte fundamental del negocio.
Con el estallido de la pandemia, la instalación de equipos profesionales para videoconferencia (entre cuyos clientes se encuentran empresas y administraciones públicas como la Diputació de Tarragona o los ayuntamientos de Reus, Tarragona, Cambrils y Salou, entre otras), reemplazó la caída de actividad en oficinas, pasando de un 10% de su facturación a un 40% durante los momentos más intensos del confinamiento. Hoy, esta área de negocio se sitúa en un 20%, consolidada como otro pilar de futuro.
«Siempre hemos ido evolucionando y adaptándonos a la tecnología que llegaba, buscando estar al día», resume Bergadà, que cuenta con que las próximas generaciones seguirán ese camino.