Encuentran el cadáver de un caballo abandonado en los Ports de Tortosa-Beseit
La Guardia Civil de Tarragona rescata en La Sénia dos ejemplares vivios y localiza el cuerpo de un tercero que se cayó en una fosa y posiblemente murió por las heridas e inanición
El Seprona de la Guardia Civil, la unidad que vela por la vigilancia de la fauna y la flora tuvo conocimiento el pasado 10 de noviembre que en un paraje del Parque Natural dels Ports de Tortosa-Beseit, en el término municipal de la Sénia (Montsià), había aparecido un caballo muerto.
Los agentes de la Guardia Civil de esta unidad se trasladaron al lugar indicado (por las personas que localizaron el cadáver caminando por ese paraje) y dieron con el cadáver del equino.
Estaba en un espacio recóndito del parque y parecía que había fallecido a causa de un accidente fortuito, ya que fue encontrado era un foso con cierta profundidad, del cual no había forma de salir.
Los agentes realizaron unas primeras indagaciones, de las que pudieron saber de la existencia de más caballos en la zona. Tuvieron conocimiento que esos ejemplares carecían de cualquier tipo de control, ni administrativo ni sanitario, por lo que se procedió a la búsqueda de los mismos. Se localizaron dos caballos más, una yegua y un potro en aparente buen estado de salud.
Los agentes lograron identificar a la persona responsable de los caballos que vagaban sin control alguno y sin ejercer su responsabilidad sobre su alimentación y su salud, procediendo a levantar varias actas de denuncia.
Las denuncias se formalizaron por abandonar animales vivos, así como otras por carecer de la documentación sanitaria exigida para el movimiento y transporte de animales, carecer de identificación de los mismos y trasladar animales a una ubicación sujeta a requisito de autorización previa (Reserva Nacional de Caza/Parque Natural). Fueron remitidas al Departament d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural de la Generalitat, competente en este caso.
Igualmente, el introducir animales sin control sanitario en una zona, como el Parque Natural dels Ports, donde se gestionan diferentes actividades ganaderas y económicas controladas, como el engorde de ganado para el consumo humano, supone un alto riesgo de contaminación zoonótica, haciendo peligrar el desarrollo normal de esas actividades.