La sanción del Nàstic-Málaga, al detalle
El comunicado del Juez Disciplinario de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) sanciona de forma dura a dos jugadores, Nacho y Concha, cierra el estadio 4 partidos oficiales (jugar sin público) e impone sanciones económicas que suman más de 12.000 euros
La Real Federación Española de Fútbol ha oficializado en sus canales oficiales las sanciones de los dos partidos de vuelta de los play off de ascenso a Segunda A, siendo la más severa a la que atañe el partido del Nou Estadi entre el Nàstic y el Málaga.
Dentro de los parámetros del partido, el Juez Disciplinario ratifica las amonestaciones (tarjetas amarillas) a Pablo Trigueros y Gorka Santamaria por juego peligroso; y a Joan Oriol y Jaume Jardí «por cualesquiera otras acciones u omisiones constitutivas de infracción en virtud de lo que establecen las Reglas de juego». En otras palabras, pro protestar.
Pero las sanciones deportivas para jugadores del Nàstic van en aumento a medida que se desglosa el parte. Nacho González es uno de los damnificados. El Comité de Competición le sanciona con un partido por la doble amarilla, pero le añade otros dos partidos por «no dirigirse al vestuario» al ser expulsado», 2 más por protestas al árbitro; y el remate final son los 3 meses de sanción por agresión a los árbitros. En definitiva 5 partidos y otros tres meses para el defensa central grana, al que le imponen una multa de 2.400 euros (y otra de 405 al Nàstic).
David Concha es otro de los nombres propios de la resolución del Juez Disciplinario Único. 6 partidos por «gritar y gesticular protestando» una decisión del árbitro Eder Mallo y «dirigirse hacia uno de los árbitros asistentes con insultos y ofensas verbales». Además, Concha deberá cumplir otros dos partidos de suspensión «por no dirigirse al vestuario» al ser expulsado y otros 4 por manifestar actitud violenta hacia uno de los asistentes. El jugador cántabro estará 12 jornadas sin poder vestir de corto.
La multa también es de 2.400 euros para el jugador grana (y otros 495 que deberá abonar el club).
A nivel de club, el Nàstic es sancionado por cuatro razones: alteración del orden del encuentro: minuto 33 (moneda de 20 céntimos), minuto 72 (dos bengalas); Multa y apercibimiento de clausura por lanzamiento de balones al terreno de juego y finalmente, multa y celebración de 4 partidos a puerta cerrada «por infracciones muy graves por omisión del deber de asegurar el correcto desarrollo de los espectáculos deportivos».
La resolución del juez incorpora el informe del delegado federativo, que detalla las incidencias de lo ocurrido durante el partido, la prórroga y la finalización del encuentro. Y a raíz de ello se van analizando los incidentes que reportarán en la multa económica establecida.
Finalmente, la resolución habla de la gravedad de los incidentes de los gritos e insultos y los comportamientos que afectan a la existencia de riesgo físico y personal de agresión. Y en base a estos hechos, se justifican los 4 partidos a puerta cerrada y los 9.000 euros de multa.
Lea la resolución íntegra: