La Rapitenca certifica su descenso ante el Girona ‘B’ (4-2)
El resultado supone un catigo excesivo para el conjunto dirigido por Jordi Martín
No se produjo el milagro y la derrota en el municipal de Riudarenes contra el filial del Girona, condena a la Rapitenca al descenso de forma matemática, a una jornada para finalizar la competición de la Tercera RFEF, categoría de la que se despedirá en la Devesa ante el L’Escala.
El resultado final representa un excesivo castigo por los méritos realizados por la Rapitenca, que, sobre todo en el primer tiempo, mereció al menos marcharse a los vestuarios con el empate.
Jordi Martín salió con un once titular con novedades, destacando el debut en la portería de Cristian Adell. El partido se complicó muy pronto y, en el minuto cinco, en el primer córner favorable a los locales, Oriol Comas, cabeceó dentro del área pequeña para superar a Cristian.
El empate llegó pronto, en una buena jugada ofensiva, con centro de Àlex Forés, el mejor de los visitantes en el primer tiempo. La dejó pasar Adam para Gerard Vergé, que remató al fondo de la red.
Los rapitenses reclamaron un penalti por un empujón a Adam cuando se disponía a rematar, y seguidamente el guardameta Cristian Adell, que tuvo un buen debut, efectuó una meritoria intervención, en la jugada que fue el preludio del segundo gol local, conseguido por Miguel Ángel, hijo de Michel, el actual entrenador del Girona, con un excelente remate.
En la segunda parte bajó el ritmo del juego y los jugadores fueron acusando el esfuerzo de un primer tiempo trepidante. El equipo local aumentó su renta, con el tercer gol de su máximo realizador, Carlos Garrido, culminando una jugada de contragolpe.
El segundo tanto rapitense llegó con un gol fantasma, después de un remate de Marc Barragán que, según el árbitro, traspasó la línea de gol. Ya en tiempo añadido, los locales marcaron el cuarto gol, aprovechando Minsu un pase filtrado para superar a Cristian en su salida con un remate ajustado al palo.