El Nàstic espera cambiar la tendencia del equipo tras ganar a la Cultural

El conjunto grana logró poner fin a una racha de siete partidos sin ganar con un partido ante la Cultural Leonesa completo y que puede significar un punto de inflexión

La victoria del Nàstic ante la Cultural Leonesa (3-0) tiene pinta de ser uno de esos partidos recordados a final de temporada. El día que lo cambió todo. Que supuso un punto de inflexión.

Había muchas miradas en el encuentro. Más tensión de la que se pudiera pensar desde fuera. Con dos ausencias de última hora como Gorka Santamaría y David Concha. Ambos, como Marc Fernández y Nacho, lesionados, se vistieron de corto. Aunque solo fuera para acompañar a sus compañeros. Hasta Marc Álvarez, aun con muletas, tras la operación, quiso estar presente para apoyar desde la grada. Síntoma de la importancia que para todos ellos tenía el duelo.

El partido estuvo en sintonía de lo que ha sido el Nàstic de Dani Vidal desde el inicio. Generó ocasiones, defendió con seriedad e interpretó bien el juego. La diferencia estuvo en los detalles. Llevaban siete jornadas cayendo del lado contrario. Palos, goles anulados, errores puntuales duramente penalizados por el rival, malas decisiones en los metros finales, etc. Cualquiera de ellos era suficiente para evitar la victoria grana. El domingo, ante la Cultural y Deportiva Leonesa, todos esos gestos se decantaron hacia el costado tarraconense.

A los diez minutos de partido, Jaume Jardí cazó un balón que pudo haberse perdido por el camino. El cambio de orientación de Andy lo quiso pinchar con la puntera Pablo, no llegó y tan solo la rozó lo justo para hacer dudar al defensa. Jardí la plantó al piso, recortó y mandó un zurdazo duro, que desvió milimétricamente el defensor para superar al meta y poner el 1-0. La tendencia comenzaba a girarse.

El Nàstic gozó de más ocasiones. Un par de Montalvo. El centrocampista de Riudoms está teniendo más llegada desde la segunda línea. Como ante el Sestao y en Irún, gozó de oportunidades. En una, disparó alto. En la otra, optó por un pase antes que probar a cara puerta.

El 2-0 también llegó con ese punto a favor que faltaba. El pase de Andy fue espectacular. Un golpe de varita que hubiera acabado la serie de Harry Potter en el primer capítulo. El remate de primeras de Pablo lo rechazó el meta. En otros partidos, ese despeje se hubiera ido a córner o a pies del defensa. El domingo le quedó un remate cómodo al delantero grana para ponerla en la red.

Lógicamente, el Nàstic hizo mucho más que llevarse esos detalles. Ganarle 3-0 al equipo que llegaba como líder al Nou Estadi, con solo seis goles en contra, no se consigue solo con detalles. El conjunto de Dani Vidal completó un partido redondo.

En ataque, golpeó de manera precisa. Con Andy desatado, Pablo Fernández y Jaume Jardí tuvieron el acierto que se les pedía. El atacante de Candás anotó su tercer tanto del curso y el reusense el segundo.

En la defensiva, el Nàstic también rayó a gran altura. Apenas concedieron ocasiones a la Cultural. Defendieron sin hundirse y mantuvieron al ataque leonés alejado de los dominios de Alberto Varo. Un desempeño en el que trabajó todo el mundo. Los laterales acertaron en la toma de decisiones para profundizar en ataque. Trigueros y Dufur despejaron sin contemplaciones. El medio del campo trabajó en ambas direcciones. Los dos que comenzaron, Borja y Montalvo, y también Óscar Sanz, que marcó territorio nada más salir.

Solo el exgrana Guillermo Fernádez pudo disparar contra los tres palos. Un remate de primeras que el portero del Nàstic despejó con una gran intervención. No hubo más peligro a la portería de Varo, hasta el penalti. En el minuto 90, el colegiado Usón Rosel señaló una pena máxima inverosímil. Berto se dejó caer en el área ante Joan Oriol. El lateral de Cambrils ni le rozó. Pero el árbitro picó en el engaño del delantero del cuadro leonés. Como suele pasar en estas circunstancias, el ‘karma’ se cobró lo suyo y Varo atajó el lanzamiento del propio futbolista.

Una victoria para poner fin a una racha negativa, salir reforzado y para cambiar la dinámica.