El CB Valls suma su quinta victoria ante el CB Igualada
El Joana Ballart disfrutó de un partido muy competido. Los locales dominaron los detalles en la segunda mitad y consiguieron llevarse el triunfo
El CB Valls se llevó un partido de altura entre dos equipos que regalaron al Pavelló Joana Ballart un choque trepidante, intenso y competido hasta el final. Los locales supieron sufrir en el primer tiempo, cuando el Igualada exhibió acierto desde la línea de tres, y en el segundo tiempo echar mano del físico para imponerse.
Valls e Igualada ofrecieron un primer cuarto electrizante. Desde las primeras posesiones se impuso mucho ritmo al juego. Baltà, por los locales, y Tejero, por los visitantes, fueron los primeros protagonistas del choque. Se marcaron un duelo de pistoleros con triples y anotaciones. En el Valls se sumaron al buen arranque Roger Pérez y Oriol Besora para darle la primera ventaja a los vallenses (10-5).
Pero el primer parcial tenía nombre y apellidos: Edu Tejero. Anotó 10 puntos en los primeros 10 minutos del partido para lanzar a los suyos con un parcial de 0-13 que situó el 10-18 en el marcador del Pavelló Joana Ballart. La fórmula que encontró el técnico Víctor Neila para frenar al base del Igualada fue con Óscar Ngomo. El pívot intimidó en la zona, tanto en la defensa sobre Tejero, como también en ataque con la captura de rebotes ofensivos. El trabajo del pívot vallense y las canastas de Sisco Moreno y Oriol Besora pudieron frenar el dominio visitante (17-22).
El Igualada castigó al CB Valls desde la línea de tres con triples imposibles de Carles Fons y Lluc Sala. Todo el acierto que tenían los visitantes era el que le faltaba al cuadro rojiblanco en los momentos iniciales del segundo cuarto (24-31). Hacían muchas cosas bien en ataque, pero no había precisión en el último contacto con la pelota. Eso cambió en los dos minutos finales de la primera mitad. Todo lo que la canasta visitante había repelido hasta ese momento, comenzó a entrar. Y al revés. El Igualada se atascó en ataque, mientras Roger Pérez, Guillem Fábregas y el espectacular triple de Oriol Besora, en el último suspiro, pusieron con sus triples al CB Valls por delante en el marcador al concluir la primera parte (34-33).
La victoria provisional al descanso le dio confianza al CB Valls para encarar el segundo tiempo. Los de Víctor Neila llevaron el partido al aspecto físico, donde se sabían ganadores. Los jugadores rojiblancos se impusieron en la lucha en la pintura. Falló la mano en los tiros libres para poner una distancia amplia en el electrónico (46-38). Suficiente para que el técnico visitante, Víctor Belenguer, parase el duelo. La consigna en el tiempo muerto fue clara, igualar la intensidad local. Un cometido que sus jugadores ejecutaron a la perfección, sacando faltas de tiro y dejando el resultado igual que estaba antes de iniciar el tercer periodo (46-45). Una distancia que prometía un último cuarto vibrante.
Y lo fue. El duelo enloqueció. Se volvió un correcalles con transiciones constantes. Un escenario que las defensas supieron dominar. Se impusieron a unos ataques que se llenaron de lanzamientos de tres. Muchos forzados que no entraron. No había canastas fáciles. Todas eran fruto de la lucha casi hasta el límite. El CB Valls se encontró más cómodo que su rival y cogió ventaja. Aprovechó dos pérdidas del Igualada para dar un golpe que los del Anoia les costó encajar. Sabían que no tenían margen y esa presión les llevó a cometer imprecisiones. De las que no se salvó el Valls. Con todo a favor cayó en la vorágine histriónica que necesitaba su adversario. Baltá erraba tiros libres y los del Joana Ballart no conseguían cerrar el duelo. Un rebote ofensivo de Vinicius a falta de un minuto, que le concedió dos tiros libres anotados, que dieron tranquilidad a los locales y decantaron el partido del lado vallense (63-57).