Mucho más que mánagers
Los representantes ofrecen apoyo logístico y artístico a sus clientes justo en un año de repunte del sector
Hay en la figura del mánager artístico un elemento de fraternidad necesario para convivir con cierto éxito en la profesión. Hablamos de un oficio que trata con personas de un sector amplio, no sólo con miembros de un grupo o actores o actrices, también existen los técnicos de distintos ámbitos o hasta cualquier miembro de brigada de Ayuntamiento que debe instalar un escenario. De ahí que el representante, mánager o productor cultural necesita de una empatía indiscutible para alcanzar el éxito en su ecosistema.
La profesión vive este año un repunte importante, sobre todo después del levantamiento de las restricciones que provocó el coronarivus y que dejaron a la cultura muy maltrecha. «Creo que voy a cerrar el año con 300 bolos», asegura Domingo García, propietario de Rambla Management. Mientras, Tito Salvat, de Produccions Submarines, reconoce que «estamos en las mismas cifras que en pre-pandemia. Calculamos tener 700 actuaciones». Hasta el punto que «andamos muy animados. El verano promete mucho, semanas de trabajar de lunes a lunes».
Produccions Submarines ejerce la representación de grupos del calado de Doctor Prats, Roba Estesa o Porto Bello, entre otros. En su oficina se asesora
en distintos ámbitos, incluso el logístico. «Intentamos que los grupos se limiten a salir al escenario a tocar y a disfrutar», confiesa Salvat. Mientras, Rambla Management cumple 10 años de vigencia y se ha ganado un lugar entre las bandas de versiones, entre ellas, Tàrraco Surfers, Músics de Carrer, Popurris Band o Seguirem. También trabaja con Pemi Rovirosa, compositor y guitarrista de Lax’n Busto. Otro de sus puntos fuertes de negocio se ha situado en las fiestas mayores o los ciclos que organizan los Ayuntamientos. Programarlos y exponer producciones de calidad le distinguen.
«Antes de cada bolo elaboro un pre-plan de actuación. Me gusta controlar hasta la medida del escenario en cuestión. Es importante para mí, para controlar los detalles por si aparece algún imprevisto», confirma. Domingo, además, conoce el mundillo al dedillo, ya que forma y ha formado parte de distintos proyectos como músico. «Mucha gente me dice que se nota mucho que me gusta lo que hago a la hora de enseñar mis propuestas», reflexiona.
15 años en la profesión
Por su parte, José Carlos Pérez, conocido en el ambiente como el Chatarra, acumula ya 15 años en la ocupación de mánager. Natural de Reus ha llevado a bandas como Doble Rombo o Vergüenza Ajena, aunque la crisis pandémica le ha afectado. «Poco a poco voy retomando otra vez el oficio», asegura. En la actualidad, su cartera de clientes contempla a Ready to Rock y la Prole Band, destinados a las versiones. «Lo que hago es una función de mánager, de llevar a los grupos a
ambientes y perfiles en los que encajen. No soy promotor, aunque ahora parece que todo se mezcla», aclara.
Marina Navarro conoce el arte y sus entrañas casi el milímetro. Esta tarraconense encabeza Music Art Management, una propuesta que nació en los 90 vinculada a la música y que se ha extendido hacia el mundo de la ficción y la organización de eventos. «Creo que la figura del mánager se encuentra muy desvirtuada. No solo realizamos labores de apoyo o coaching a la carrera de un artista, también se crea un vínculo personal muy importante». Marina añade además que «cuando estamos rodando una película durante 4 meses, muy lejos de casa, el actor o la actriz se convierten en familia».
Music Art Management dispone de sede en Roma y en Miami, además de su centro neurálgico nacional. Exporta talentos españoles al extranjero y al revés, carreras internacionales las introduce en el país. Es referencia.