Y volar...
Diario de un suicidio. El gran Fernando Aramburu vuelve con una viva novela tras el éxito total de ‘Patria’
Cinco años después del arrollador e indiscutible éxito de Patria, Fernando Aramburu vuelve a reaparecer (aunque gracias a Bittori, Miren y el Txato jamás se llegó a ir del todo) en el territorio editorial.
A buen seguro no le ha resultado tarea fácil, pero esta vez viene acompañado de Toni, un hombre de mediana edad, divorciado, con un hijo ya prácticamente adulto, una bella perra y un trabajo estable como profesor de filosofía en un instituto de Madrid que, hastiado con el mundo en general, ha determinado poner fin a su vida. Sin angustias, sin mucho temor y arduamente convencido, ha puesto incluso fecha a su despedida: la tarde-noche del 31 de julio del siguiente año. Se da esos 12 meses de tiempo para aclarar bien los motivos de porqué quiere dejar de vivir y dejar todos los asuntos que le conciernen (y que le importan un poco) bien solucionados.
Aunque aún no sabe cómo llevará a cabo su muerte (no quiere sufrir y desea algo rápido, por supuesto), tiene claro que quiere deshacerse de todas sus posesiones lentamente y aprovechar para hacer un recuerdo diario a sus vivencias. Estas saltan desde su infancia, al momento presente, a su despreocupada adolescencia, a recuerdos más recientes como su atormentado final de matrimonio o los inicios de su relación con Amalia, dibujándonos lentamente un retrato perfecto de Toni.
Lo que de buenas a primeras podría parecer un libro deprimente, derrotista y doloroso, gracias a la siempre plausible pluma de Aramburu, todo se torna de una narración agradable, honesta y en muchos momentos, hasta pícara, guasona que roza casi inocentemente divertida, con un tono que me ha recordado agradablemente a los tintes ElviraLindísticos.
Permanentemente conectado con la sociedad española, es habitual que sus personajes reflejen acontecimientos históricos de nuestro país, hablen de política o se enlacen con la actualidad más fluctuante. No dejan de ser importantes todos los personajes que conviven con Toni y acaban redimensionando su universo: sus padres y la relación que estableció con cada uno, su hermano ‘Raulito’, su exmujer Amalia, su hijo Nikita (Nico), su inseparable Pepa, la persona que le envía misivas anónimas, su amigo apodado Patachula, Águeda o ese amor de juventud que le persigue con su perrete Toni, la apasionante Diana Martín o la reprochable Olga, su sumisa Tina, su cuñada María Elena y sus sobrinas Júlia y Cristina...
Toni es todo un personaje que no deja de sorprendernos relato tras relato, hasta el final.
Los vencejos
Autor: Fernando Aramburu
Editorial: Tusquets
Páginas: 698