Alumnos más motivados y cohesionados en el aula
El Institut Montsià ofrece sesiones de ‘team building’, remando en el río Ebre
o trabajando con caballos, para fortalecer los lazos entre sus estudiantes
El ‘team building’ o construcción de equipos es una dinámica muy apreciada y utilizada en las empresas para mejorar la cohesión de las plantillas y la comunicación de los grupos de trabajo. Una iniciativa que podemos encontrar también en los centros educativos para fortalecer el conocimiento y la cooperación entre los alumnos de una misma clase. Éste es el caso del Institut Montsià, de Amposta. El centro, especializado en formación profesional, cuenta un con un millar de alumnos y un centenar de profesores y ofrece once ciclos formativos de grado medio y once superiores, a demás de otras formaciones como un itinerario específico para personas con discapacidad intelectual leve o programas de formación e inserción, para que alumnos que no tienen la ESO puedan sacarla y encarar su futuro profesional (informática, ventas, electricidad,...).
El ‘team building’ del INS Montsià forma parte de un proyecto más amplio, Emprenem, que se puso en marcha el curso pasado, según explica el director del centro, Carles Añó. Financiado con fondos especiales del Departament d’Educació de la Generalitat, como su nombre indica se basa en el fomento de la emprendeduría entre los estudiantes.
La formación en ‘team buiding’ se dirige a los alumnos de segundo curso de los ciclos formativos de grados medios y superiores. Se realizan al comenzar el curso, durante los meses de septiembre y octubre, para que los estudiantes se conozcan mejor.
«Estos alumnos, dentro de su curriculum, tienen que desarrollar proyectos. Y aplicamos metodologías activas, de trabajo en equipo para resolver los problemas», explica Añó.
Así, de la misma manera que las empresas privadas realizan una formación específica de trabajo en equipo, en el instituto pensaron que también les sería muy útil. «Porque en la clase se crean equipos de trabajo, pero muchas veces los alumnos no se conocen mucho entre ellos, y es positivo romper el hielo».
Las sesiones están pensadas por psicólogos y encaradas a potenciar este trabajo en equipo; que los participantes puedan ver las ventajas que supone, cuales son las necesidades, y todo de forma lúdica y distendida, en jornadas fuera del aula, al aire libre.
Este curso participan en estas sesiones unos 350 alumnos de los últimos cursos de ciclos formativos.
Los alumnos de ciclos de grado medio han pasado por las instalaciones de Temps de Cavalls, en la Galera, en una actividad planteada por el psicólogo Pere Clotet. El equipo tenía que reflexionar, colaborar y trazar una estrategia para conseguir un determinado resultado con el caballo. El objetivo: complementarse para conseguir un objetivo común.
Por su parte, los alumnos de los ciclos de grado superior han participado en una actividad en el Club de Rem Tortosa. Se trata de una bajada por el río Ebre en muletes, embarcaciones tradicionales donde van seis remeros y un timonel. «Lo importante no es ser el que rema más rápido dentro de la embarcación, sino que todos los componentes remen de forma acompasada», remarca Añó. La experiencia, que el Club de Rem Tortosa también ofrece a todo tipo de empresas y organizaciones, consiste en hacer un «Bautizo de río», descubriendo las nociones básicas para remar en equipo y bajar cómodamente río abajo, desde la ciudad de Tortosa hasta el Centro de Tecnificación del Club de Rem, en un recorrido de unos seis kilómetros. Todo ello hace ver la importancia de trabajar en equipo, de coordinarse, ir a una por el bien común. «Así, están en mejores condiciones a la hora de emprender sus proyectos en el aula», explica el director.
Premios
El proyecto Emprenem del Institut Montsià se completa con formación para el profesorado en metodologías activas aplicadas a proyectos; un asesoramiento en emprendeduría para todos los alumnos, que se da en colaboración con el Ayuntamiento de Amposta y el Consell Comarcal del Montsià; y finalmente, con la participación de los proyectos que realizan los estudiantes en diferentes concursos.
El asesoramiento, que se realiza desde las áreas de políticas activas de ocupación, aporta formación sobre oportunidades de negocio, iniciativa y responsabilidad o cómo hacer una presentación pública para posibles inversores, entre otros aspectos.
Unas propuestas que están muy bien valoradas por los alumnos, como se refleja en las encuestas que les hacen.
Todos los proyectos que se materializan en el instituto, son presentados en concursos para validar así los resultados. El curso pasado, por ejemplo, los alumnos del centro obtuvieron 14 premios, en especial en el Impuls FP, a nivel territorial pero también nacional, o los premios InJUè de la Diputació de Tarragona. En este último caso, estudiantes de INS Montsià quedaron segundos con la creación de una aplicación informática.
También han tenido premios proyectos como el «Bon dia, com estem?», en que los alumnos llaman a personas mayores que viven solas, o el diseño de un aparcamiento itinerante de bicicletas y patinetes en plataforma (ahora instalado en Amposta).
Según el director, esta metodología está dando sus frutos y motiva a los estudiantes. «Tienen muchas iniciativas, y muy interesantes. Si tienen campo para poderlas desarrollar, los resultados son impactantes y novedosos», afirma.