Una broma desde el barco encallado movilizó a todos los cuerpos de emergencias
Una llamada al 112 alertó que en el interior del velero se escucharon voces pidiendo ayuda. En la playa se encontraron unos pantalones
Todo apunta a que fue una pretendida gracia, pero obligó a movilizar a diferentes equipos de emergencias desde Bomberos a Mossos d’Esquadra, Guardia Civil, Salvamento Marítimo y Policía Local de El Vendrell.
Ocurrió hace unos días y además del despliegue que motivó la situación, revela el peligro que supone el barco embarrancado desde hace un mes frente al puerto de Coma-ruga sin que haya indicios a corto plazo de liberarlo.
Hace unos días una vecina escuchó gritos en el interior del barco sobre las nueve y media de la noche. Parecía que alguien pedía ayuda. La situación del velero, medio hundido y con el camarote llenó de agua levantó la alarma ya que desde el primer momento son muchos, también niños, los que llegan al barco y acceden al interior.
La mujer llamó al 112 y se activaron las alarmas. La Policía Local también recibió el aviso. Hasta la zona llegaron varias dotaciones de bomberos y se alertó a Salvamento Marítimo que acabó movilizando a una embarcación de Guadia Civil.
Rastreo
La Policía Local y Mossos d’Esquadra rastrearon la zona de playa y mar con lanchas neumáticas y focos pero no encontraron a nadie en el barco ni en el entorno.
Hubo un momento de preocupación al encontrar unos pantalones en la orilla. El velero está embarrancado a escasa profundidad y puede llegarse nadando sin ninguna dificultad.
Comenzó a sospecharse que los gritos que se escucharon en el barco podrían ser una broma o que un grupo hubiese decido llevar su fiesta al velero. Al no localizar nada los equipos de emergencia se retiraron.
Socorristas
Más allá de la costosa broma por la movilización de recursos, la situación revela el peligro que supone el barco embarrancado. De nada sirven las advertencias de los socorristas y cuerpos de seguridad para pedir a los bañistas que no se acerquen al velero.
El propietario sigue pidiendo ayuda para poder sacarlo del banco de arena. Hace unos días la empresa que contrató para intentar reflotarlo no lo logró, por lo que planteó hacerlo por sus medios.
Pero Capitanía Marítima le prohibe ese intento y señala que debe hacerlo una empresa especializada para esos trabajos. Capitanía señala que en el momento de tener un plan de reflotación de una empresa dará autorización.
El propietario señala que cada día que pasa hay más riesgo incluso de rotura de los depósitos de combustible. Ya da por hecho de que el barco está tan afectado que no podrá volver a navegar y deberá desguazarse.