Mateo Carbonell, propietario del Hotel Sant Jordi «Siempre seremos un hotel pequeño, pero muy familiar»
El mejor hotel de la provincia. Mateo Carbonell - Hotel Sant Jordi de Montbrió
Tras 25 años trabajando en la localidad del Baix Camp, el Hotel Sant Jordi de Montbrió del Camp recibe esta distinción de la AEHT con la ilusión de seguir trabajando con vocación de servicio y manteniendo el estilo familiar que les ha caracterizado durante toda su trayectoria. Mateo Carbonell es el propietario.
¿Ilusión con el premio recibido?
Es toda una satisfacción personal a los 25 años trabajando en una localidad como Montbrió que, en algunos ámbitos, es muy diferente de la actividad hotelera que puede haber en una ciudad como Barcelona o otras más cercanas como Cambrils o Salou.
¿Cómo de diferente es trabajar en una gran ciudad a hacerlo en una localidad más pequeña como Montbrió?
En Montbrió tenemos un turismo deportivo en muchas ocasiones o eventos pequeños. Mucha gente que viene a pasar el fin de semana y hace ruta por la zona. Somos un hotel pequeño, pero con vocación de servicio y que sigue una historia familiar. Aún así, hay cosas comunes como son el servicio de recepción de forma continuada o otro tipo de servicios que son comunes a todos los hoteles.
¿Cómo afrontan la recta final del año y más, tras recibir el reconocimiento de ayer?
Somos un hotel pequeño, de lo que ahora llaman boutique de unas 30 habitaciones, pero sumamente familiar. Nacimos así y moriremos así. Tampoco queremos ser diferentes.
¿Mantienen la ilusión del primer día?
Sí, la ilusión y las ganas son las mismas desde el primer día con este trato tan cercano y familiar, pero nos hemos tenido que adaptar a la llegada de las grande plataformas de reservas. Ha sido toda una revolución que ha cambiado nuestra manera de trabajar.
¿Qué nos falta por conocer del Hotel Sant Jordi?
Somos un espacio totalmente compatible con la presencia de otro tipo de hoteles como el Termes de Montbrió. Al fin y al cabo, el Hotel Sant Jordi es un hotel de pueblo y de fin de semana que quiere seguir trabajando y poniendo la atención y el trato familiar por delante.
El Hotel Sant Jordi abrió sus puertas el 23 de abril de 1999, precisamente el día de Sant Jordi. Nació entre flores y libros en la pequeña ciudad termal de Montbrió.