Ponen cara y denuncian a ‘SOSA’ el grafitero más buscado de Cunit
Hace meses que la Policía Local buscaba al autor de decenas de pintadas en el municipio y en localidades vecinas
Los nombres de SOSA y DTR podían verse por todo Cunit. En el pabellón, en el edificio del ya cerrado Club Brigitte, en paredes privadas, en equipamiento y mobiliario urbano, sobre murales de artistas callejeros... Si el objetivo era dejar huella, SOSA y DTR lo han logrado.
Hace meses que la Policía Local de Cunit intentaba poner rostro a las firmas de SOSA y DTR, las pintadas que aparecen con más frecuencia en muros y paredes de espacios públicos y privados del municipio. El Ayuntamiento había advertido que intentaba identificar al autor de las pintadas, pero SOSA y DTR seguía dejando su huella.
De hecho, en muchos grafiteros el reto es llegar a los espacios más inaccesibles, visibles, en el máximo de lugares y veces. Y que no te pillen. SOSA y DTR iban al límite. De hecho cuando la Policía Local ya estaba siguiendo sus andanzas, el grafitero se atrevió a plasmar su firma a lo grande en uno de los espigones de la playa. De eso hace un par de semanas.
La misma persona
Finalmente la Policía Local de Cunit ha identificado a quien presuntamente está detrás de las firmas SOSA y DTR, que resulta ser la misma persona. Es un vecino de la localidad mayor de edad y ha enviado diligencias al juzgado de El Vendrell por un presunto delito de daños continuados.
La policía cunitense realizaba un seguimiento. Hace semanas vio a un individuo con una serie de sprays que dejó en un coche y ya sospechó que podía tratarse de SOSA y DTR.
La investigación consideró que podía tirar de ese hilo y en una segunda intervención y con la colaboración ciudadana se pudo constatar la autoría de las firmas que hay plasmadas por muchos lugares del municipio.
El Ayuntamiento calcula que la reparación de los daños causados por las pintadas asciende a unos 10.000 euros.
Pero el grafitero no sólo dejaba su huella en Cunit. La instrucción de las diligencias policiales se ha comunicado a otras policías locales del Baix Penedès, Garraf y Baix Llobregat, además de a Renfe, donde el grafitero ha pretendido inmortalizarse.
También señala que cualquier persona, comunidad de vecinos o entidad que haya podido sentirse perjudicada puede ejercer su derecho de reclamación y debe ponerse en contacto con la Policía Local.
Ahora se espera que el grafitero sea citado judicialmente y deba responder de los daños causados.
El concejal de Gobernación, Xavier Lorenzo señala que el Ayuntamiento no está en contra del arte urbano, pero que hay que valorar lo que es arte y que esas pintadas no lo eran. Apunta que pueden destinarse espacios y muros donde los donde los aficionados al grafiti puedan expresar su arte.
De hecho ya ha facilitado muros de edificios públicos para plasmar arte urbano como en el edificio de la concejalía de turismo, en el entorno de la biblioteca o en un muro de 36 metros que narra la historia del municipio.