El proyecto de Hard Rock, en vía muerta por la división del Parlament
Mientras elimina las ventajas fiscales concedidas al inversor, el PSC se abstiene en una moción a favor del proyecto
La división en el Parlament sobre Hard Rock mantiene la inversión en vía muerta doce años después del primer anuncio. Tras dar los primeros pasos para eliminar las ventajas fiscales el miércoles, ayer el macroproyecto turístico de Vila-seca y Salou fue por enésima vez objeto de debate en la cámara. En esta ocasión lo hizo para aprobar una moción del PP en la que insta al Govern de la Generalitat a aprobar el Plan Director Urbanístico (PDU). Un trámite que lleva pendiente desde el año 2020, cuando la justicia tumbó el anterior PDU, y que es indispensable para construir el complejo de hoteles, casino y zonas de compras y ocio.
Los populares tiraron adelante su propuesta con el voto a favor de Junts y la abstención del PSC, mientras que ERC, Comuns, CUP y Aliança Catalana votaron en contra. Hace justo un año, el Parlament ya instó al anterior Govern a desbloquear el PDU. Entonces la petición la lideraban los socialistas, que pusieron como condición a ERC hasta en dos ocasiones la aprobación del PDU para dar su apoyo a los presupuestos. Una petición a la que los republicanos accedieron.
Ahora, fuentes del PSC justifican su abstención aludiendo que el contenido del informe ambiental corresponde al ámbito estrictamente técnico y que no se puede presuponer su contenido.
Dos años del informe ambiental
La moción aprobada ayer pide al ejecutivo que resuelva el informe de impacto ambiental que mantiene bloqueada la aprobación definitiva desde febrero de 2022, cuando se aprobó el planeamiento urbanístico de forma inicial. Este informe negativo, emitido por el departamento de Acció Climàtica hace ya dos años, exige subsanar una serie de criterios medioambientales, como la conectividad ecológica entre los espacios naturales de la zona, una evaluación ambiental de la movilidad que generará el complejo, así como concretar las medidas ambientales compensatorias.
Por otro lado, el texto pide que se convoque el Consejo Rector del Consorci del Centre Recreatiu i Turístic de Vila-seca i Salou, organismo que debe dar el visto bueno antes de aprobar el PDU y que no se reúne desde hace años.
De esta forma, la cámara catalana aprueba impulsar Hard Rock el día después de hacer lo contrario tramitando por la vía exprés las propuestas de ERC y Comuns para revertir la fiscalidad al juego. Una medida que sí obtuvo el apoyo del PSC. Un paso para adelante y dos para atrás.
El diputado del PP Pere Lluís Huguet celebró la aprobación de su moción y defendió que en Tarragona son necesarias inversiones como las del Hard Rock. Asimismo, dijo que el Govern «tiene la obligación de desbloquear» el proyecto.
La postura de los alcaldes
Mientras Hard Rock sigue ocupando minutos de debate en el Parlament, en el territorio los alcaldes siguen pidiendo que el proyecto no se convierta en arma política. El alcalde de Vila-seca, Pere Segura, critica que se cambien las condiciones al inversor «con carácter retroactivo» y teme que este sea el punto final del proyecto. Además, considera que «estas medidas ponen en riesgo otras inversiones en el territorio y eso es lo grave para mí. Se trivializa y se pone en riesgo la prosperidad de las comarcas del sur de Catalunya».
Su homólogo en Salou, Pere Granados, es más optimista y confía en «que el inversor acepte esta situación y al final comiencen las obras lo antes posible. Que se apruebe definitivamente el PDU y que se comience a trabajar, generando puestos de trabajo y riqueza».