Los pescadores del Port de Cambrils regresan al mar
Las ocho barcas de arrastre del puerto cambrilense reanudaron ayer su actividad después del periodo de veda que ha durado del 15 de abril al 1 de julio
Después de dos meses y medio paradas, las ocho barcas de arrastre que quedan en el Port de Cambrils volvieron ayer a su actividad.
La jornada de pesca Tornem a la mar/ Tornem a pescar se llevó a cabo desde las 6.00 hasta las 17.00 horas.
Durante todo el día, los pescadores estuvieron haciendo su labor que, posteriormente al finalizar el recorrido, vendieron todo lo pescado en La Llotja. «Han vendido alrededor de 3.000 kilos», dice Jordina Benaiges, jefa de administración de la Confraria Pescadors de Cambrils.
Esta subasta fue la oportunidad perfecta para comprobar como había ido la pesca después de dos meses y medio de parada, y también se habló sobre las expectativas y perspectivas de la temporada y sobre el mundo pesquero, «tanto cambrilense como del resto del país».
Solamente se hizo para restauradores, negocios y pescateros. «No es una venta para particulares ni privados», sostiene.
El periodo de veda se realizó, del 15 de abril al 1 de julio, con la finalidad del crecimiento del pez y, sobre todo, la regeneración del fondo marino. Es un tiempo crucial para el ecosistema, permitiendo que las poblaciones de peces se recuperen después de ser sobrecargadas por la pesca. Además, ha permitido la preservación de algunos hábitats costeros.
«Durante estos meses han dejado que el pescado se hiciera más grande, especialmente la merluza, y así poder vender producto de más calidad», explica Benaiges.
Desde los días previos, con el paréntesis de las fiestas de Sant Pere, los pescadores de estas ocho embarcaciones han estado trabajando dejándolo todo a punto para el reemprendimiento de su actividad y así volver a capturar y poder traer pescado fresco de calidad a los hogares y restaurantes de la ciudad.
El sector se reanuda con la esperanza de que se puedan garantizar la explotación sostenible de los recursos marinos y la protección del medio ambiente.
Se espera que esta parada sirva para impulsar la actividad económica en la zona y tenga un impacto positivo en la economía de los pescadores locales.