La Generalitat deja la aprobación de Hard Rock para después de las municipales
La Comissió d’Urbanisme se reúne mañana pero sin abordar el Plan Director Urbanístico
La aprobación del nuevo Plan Director Urbanístico (PDU) que debe desbloquear la inversión de Hard Rock en terrenos del CRT de Vila-seca y Salou tendrá que esperar un poco más. Mañana se celebra la tercera sesión del año de la Comissió Territorial d’Urbanisme del Camp de Tarragona, pero en la orden del día no figura la modificación del PDU, un trámite que se arrastra desde finales de 2020, cuando el TSJCat tumbó el anterior planeamiento. Aunque el Govern se ha comprometido a aprobar definitivamente la modificación del PDU en el primer semestre de 2023, la proximidad con la cita electoral ya hacía prever que la cuestión no se abordaría hasta la próxima sesión de la comisión, programada para el 21 de junio.
Tras largos meses de negociaciones para tirar adelante los presupuestos de la Generalitat de 2023, el pasado mes de febrero, el Govern se comprometió con el PSC a desencallar la aprobación del PDU en el primer semestre del año. Un acuerdo, además, que establecía el compromiso del Govern a completar todos los trámites necesarios para que las obras de Hard Rock puedan empezar en 2024, así como garantizar la disponibilidad de los terrenos hasta que se efectúe la operación de compraventa.
En este sentido, la aprobación definitiva del PDU es una de las condiciones para que la multinacional del ocio norteamericana haga efectiva la compra de los terrenos donde ha proyectado su macrocomplejo turístico, que incluye hoteles, casino y otros espacios de compras y ocio. En los presupuestos de 2022, la Generalitat ya reservó una partida de 120 millones para adquirir estos terrenos, propiedad de CriteriaCaixa, que posteriormente abonará Hard Rock a medida que la tramitación urbanística avance.
La revisión del PDU del CRT se aprobó de forma inicial en febrero de 2022. El nuevo redactado solventaba las deficiencias que llevó al juez a anularlo cambiando la distribución del suelo para eludir las zonas de riesgo químico. Tras resolver las alegaciones presentadas por las diferentes administraciones y entidades, la previsión era que la aprobación definitiva llegara antes de acabar 2022. Sin embargo, en octubre se conocía la existencia de un informe desfavorable del departamento de Acció Climàtica que ponía en duda las condiciones medioambientales del proyecto. La enésima traba que obligaba a retocar de nuevo el PDU para hacer frente, principalmente, a tres aspectos: la conectividad ecológica entre los dos espacios existentes de la Xarxa Natura 2000 –Els Prats d’Albinyana y la Sèquia Major–, una evaluación ambiental de la movilidad que generará el complejo, así como concretar las medidas ambientales compensatorias.
Nuevas acciones de protesta
Por otra parte, la Plataforma Aturem Hard Rock anunciará mañana nuevas acciones de protesta en contra del proyecto de turismo y ocio proyectado en terrenos del CRT de Vila-seca y Salou. Tras las últimas acciones celebradas en Barcelona, la plataforma prepara acciones junto a otros colectivos del Camp de Tarragona críticos con este proyecto para los próximos meses.