El turismo genera uno de cada tres puestos de trabajo en la provincia de Tarragona

La hostelería de la Costa Daurada y Ebre recupera definitivamente las cifras de ocupación previas a la pandemia y apuesta por la sostenibilidad socioeconómica y mediambiental

5,6 millones de turistas visitaron en 2023 la provincia de Tarragona. Los alojamientos de la Costa Daurada y las Terres de l’Ebre registraron el año pasado más de 20 millones de pernoctaciones, unas cifras que devuelven la actividad turística a niveles previos a la pandemia y que reafirman al sector como el principal motor socioeconómico del territorio. Un sector que ha sabido salir a flote tras el frenazo total a la actividad en 2020. Sin tener que lamentar ninguna fallida de empresas y creciendo en muchos de los mercados emisores.

«Somos un destino maduro, con empresas muy consolidadas y con gran experiencia. Eso nos ha permitido que, ante eventualidades fuertes como fue el Covid, el sector se resintiera en el momento, pero se recuperara rápidamente», explica Berta Cabré, presidenta de la Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme de Tarragona (FEHT).

El turismo tiene el doble de peso en nuestra economía respecto al que tiene en el conjunto de España. Así, si a nivel estatal alrededor del 12 % del PIB lo sostiene el sector turístico, en las comarcas de Tarragona este dato representa el 26 %. La aportación directa de las empresas turísticas a la economía tarraconense supera los 6.000 millones de euros.

Un dato que se traslada también al mercado laboral, donde el turismo es la principal punta de lanza en la generación de empleo. Más de 25.000 personas tienen una profesión en el turismo de la demarcación, lo que representa alrededor del 28,5 % del total de personas empleadas.

La FEHT, que representa el 90 % de plazas de alojamiento en la provincia, destaca la gran capacidad de reinversión, tanto de las empresas de alojamiento como de los municipios turísticos, para continuar siendo un destino atractivo y de referencia en el Mediterráneo. «Tenemos que continuar haciendo bien las cosas, mejorando continuamente y creciendo cualitativamente», apunta Cabré.

En este sentido, desde el empresariado de la hostelería apuestan por un crecimiento de la actividad sostenible en el tiempo y con el medioambiente. «Nos debemos a nuestros clientes y lo que hacemos es una escucha activa para tener capacidad de innovación e inversión. Nos gusta sorprender a los clientes y seguir siendo pioneros», destaca Cabré. No en vano, la provincia cuenta con reconocimientos a nivel europeo que sitúan cada año a diferentes establecimientos entre los mejores del continente.

El del turismo es, además, un sector que tiene todavía capacidad de crecimiento. Actualmente, la actividad está concentrada entre marzo y octubre. Desde el empresariado, trabajan para conseguir que haya turismo los doce meses del año. Un reto en el que tienen a PortAventura World como gran aliado y a Hard Rock como esperanza para dar el acelerón definitivo. «Necesitamos diversificar la tipología de cliente que viene. Si finalmente no se hace, habremos perdido una gran oportunidad difícil de recuperar», lamenta Cabré.

«Nuestro gran reto como sector desde hace muchos años es romper la estacionalidad –reconoce Cabré–. Poco a poco lo estamos haciendo. Hace 20 o 30 años hablábamos de actividad turística poco más de tres meses al año y hoy ya tenemos buenas ocupaciones durante ocho meses». Aun así, todavía hay trabajo por delante y apuestas muy fuertes por productos turísticos especializados en segmentos como el deportivo, el cultural o la enogastronomía, que atraigan gente más allá del sol y playa.

«El futuro no pasa por crecer en los meses de verano, que ya se llena y la capacidad es la que es, sino por trabajar al 80 % de ocupación 365 días al año», sintetiza la presidenta de la FEHT.