El turismo crece durante las fiestas en la Costa Daurada
Restaurantes y hoteles de la provincia
han colgado el cartel de completo
Las fiestas de Navidad y la llegada del año nuevo han provocado que gran cantidad de personas visiten la Costa Daurada y la provincia de Tarragona. Esto ha provocado que restaurantes y hoteles hayan podido colgar el cartel de completo.
El perfil más habitual ha sido el cliente de ámbito nacional y con reservas a última hora.
Algunos de los municipios con mejor ocupación han sido Cambrils y otras poblaciones costeras como La Pineda, debido a atractivos turísticos cercanos como Port Aventura y porque la mayoría de los establecimientos permanecen cerrados durante la temporada baja, lo que ha comportado altas cifras de ocupación y reservas en esos hoteles y restaurantes que han mantenido sus puertas abiertas.
«Los días de Navidad son muy importantes en nuestro sector, teniendo en cuenta que enero y febrero son los peores meses en facturación y consumo en toda la provincia, por climatología y por la cuesta de enero», explica el presidente de la Associació Hotelera de la Província de Tarragona, Magí Mallorquí. «Los establecimientos que abren los 365 días y, por lo tanto, dan trabajo y ofrecen su servicio todo el año, como hacen el 90% de los alojamientos de la AEHT, necesitan hacer caja durante estas fiestas», añade.
Por lo que respecta exclusivamente a la hostelería de toda la provincia de Tarragona ha conseguido cifras del 100%, prácticamente en todo el territorio con el lleno en sala garantizado, sobre todo en los días festivos y fines de semana. De esta manera lo manifiestan los representantes de la AEH Tarragona Ciutat, Vila-seca La Pineda, Reus o les Terres de l’Ebre.
Números similares en toda la provincia
En cómputos generales, toda la provincia de Tarragona ha concentrado la ocupación en la primera semana festiva, siendo más elevada en los alojamientos rurales.
En Tarragona ciudad, concretamente, del 27 al 31 de diciembre, se registró una ocupación media del 70% que ascendió hasta el 90% en la noche de Fin de Año.
En las capitales de comarca menos turísticas, como pueden ser Reus y Valls, los alojamientos estaban destinados, principalmente, para las empresas. Las cifras de ocupación a las que estaban acostumbrados han disminuido respecto a una semana laboral normal, pero se está empezando a recuperar en estos primeros días que llevamos de año.
Si nos desplazamos al Priorat, los alojamientos turísticos han tenido cifras que rondan al 40%.
Este bajo porcentaje se debe que el territorio suele acoger a un turista muy centrado en el enoturismo, que suele concentrarse durante la primavera y el otoño.
En el caso de la Terra Alta y la Conca de Barberà, las cifras han sido más elevadas respecto a las otras comarcas, sobre todo los últimos tres días del año, llegando al 100% de ocupación, aunque disminuirá un 50% en el fin de semana de Reyes.