Calafell surcará en la meca de la vela latina
Reportaje. Dos patronas han sido invitadas a la regata de Stintino, que cumple 40 años y es un referente de la navegación tradicional y el patrimonio marinero
Es el destino soñado de los amantes de la vela latina. De la navegación más romántica y también exigente. La Regata della Vela Latina – Trofeo Presidente della Repubblica que desde hace 39 años acoge la localidad de Stintino en Cerdeña.
Centenares de barcas de vela latina procedentes de todo el Mediterráneo participan en una regata que, pese a ese nombre competitivo, tiene más de social, de reivindicativo de la navegación tradicional y de recuperación de la esencia.
Y este año dos patronas de vela latina de la Associació Patí Català i Vela Llatina de Calafell son invitadas para formar parte de la tripulación de la histórica barca Santa Bárbara, una Carlofortina de 1953. Una de las más veneradas en todo el Mediterráneo. Con sus 8,80 metros de eslora, es un símbolo de la vela latina.
Concep Márquez y Thais Buforn navegan en vela latina desde hace años. La invitación para participar e la regata de Stintino, «supone una satisfacción y un reto», explica Bufron. Por representar a Calafell y también por divulgar la vela latina entre las mujeres. «Para que cada vez se animen a navegar en vela latina». Concep y Thais son de las pocas patronas de vela latina en activo que hay en Catalunya.
Aprendizaje
La 40 edición de la regata es del 28 de abril al 1 de mayo. Concep y Thais forman parte de una tripulación de hermanamiento alguereso-catalán que estará patroneada por Carlo Muresu, uno de los navegantes de vela latina más conocidos de Cerdeña.
Thais Buforn explica que va a ser toda una experiencia, también de aprendizaje de vela latina. Pese a que en Catalunya va calando la afición y cada vez hay más encuentros, no se disputan regatas.
«Hace años que no se celebran en Catalunya», explica la patrona. Pese a que la de Stintino no es una jornada competitiva, las barcas van al máximo tensando velas o escorando para sacarles el máximo.
Stintino es punto de encuentro imprescindible para los amantes de la vela latina y ejemplo de cómo salvar un patrimonio marítimo que se resiste a desaparecer. Una misión que también tiene la Associació Patí Català i Vela Llatina de Calafell que recupera, restaura y devuelve al mar barcas que estaban en riego de destrucción.
Salvación
La iniciativa de la regata comenzó en los años 80 cuando el turismo pasó a ser la primera actividad de la isla y relegó a la pesca y a aquellas barcas llamadas gozzi. Los hermanos Alejo se conjuraron para evitar esa decadencia y organizaron la regata. En pocos años ya participaron un centenar de barcas.
Calafell ya ha salvado decenas de barcas y promociona la vela latina para que la costa vuelva a llenarse de velas. Para recuperar un pasado que no debió perderse. Uno de los grandes retos es la réplica de la Francisca, que está apunto de cumplirse.
El patrimonio material está salvado, pero queda trabajar en el inmaterial. En las personas. Ahora son los mayores quienes aguantan las velas latinas. Los jóvenes debe animarse. Y quizá las regatas sean una forma de seducción.
La experiencia de Concep y Thais en Stintino podría impulsar una regata en la localidad. De momento Calafell ya ha izado las velas para acoger del 8 al 11 de junio la Festa de la Mar en la que participarán barcas procedentes de diferentes costas, además de talleres, conciertos y actividades relacionadas con el mar y la navegación tradicional.
Entrevista con el presidente de Patí Català Calafell, Josep Sierra.