Altafulla reclama a Tarragona 70 hectáreas de su término municipal

El gobierno local quiere cambiar las fronteras porque asegura que presta algunos servicios a tarraconenses que viven junto a su casco urbano

El alcalde de Altafulla, Jordi Molinera, ha apuntado este viernes que pedirán al Ayuntamiento de Tarragona cambiar el límite del término municipal, lo que les haría ganar unas 70 hectáreas. Molinera ha afirmado que prestan servicios a vecinos de Tarragona que viven junto al casco urbano altafullense, como vigilancia policial, agua o recogida de basura.

El alcalde ha explicado que los límites actuales se implementaron en los años 50 y ha indicado que es necesario que se «corrijan» para que «encajen más con la realidad».

La propuesta altafullense es que el nuevo límite lo marque el río Gaià aunque en esta área también se encuentra la estación de tren de Altafulla y una gasolinera. La última palabra la tendrá la Generalitat.

Molinera ha comentado que «muchos vecinos reconocen que el servicio de basura que utilizan es el de Altafulla pese a que pagan el de Tarragona» y que la Policía Local hace al casi «una actuación diaria» en zonas que son estrictamente de su término municipal.

«Mucha vecinos que viven en este espacio hacen vida social en Altafulla y los niños van a escuelas y guarderías de nuestro municipio», ha manifestado.

El origen de la situación fue en los años 50 del siglo pasado, cuando la administración franquista decidió que los terrenos de Tamarit se anexaran al término municipal de Tarragona. «Que la estación de tren de Altafulla esté en término municipal de Tarragona, no es normal.

Que la gasolinera y el bufete de Altafulla estén en término municipal de Tarragona, no es normal», ha ejemplificado Molinera. Así, los terrenos afectados serían parte de la playa y zona del Vinyet, un «pulmón verde» por la localidad.

«A ojos de la gente ya es Altafulla. Hemos demostrado una implicación importante en la gestión del territorio. Lo que queremos es una mejor gestión para que la ciudadanía saque un mejor resultado», ha señalado; y añadió que se trata de una petición «razonable».

Plazos

El Ayuntamiento de Altafulla tendrá que votar sacar adelante la petición en el pleno del próximo 22 de febrero. Una vez prospere, se abrirá un período de negociaciones con Tarragona de 60 días. Molinera ha destacado que si durante ese plazo hay acuerdo «todo será mucho más sencillo».

Si no hay entendimiento o hay alegaciones de vecinos, Consell Comarcal del Tarragonès o Diputació de Tarragona, «será la Generalitat quien dictaminará si debe haber un cambio de deslinde», ha reconocido el alcalde.

Molinera pidió «sensibilidad» al Ayuntamiento de Tarragona para que acepte la modificación. «Pedimos a la capital, una ciudad con la que tenemos muy buena vecindad, que haya una respuesta ante esta propuesta lógica», ha finalizado. Así, la próxima semana tendrán una primera reunión con el Ayuntamiento de Tarragona para exponer la iniciativa.