Los fans de Taylor Swift pueden decidir el presidente de los EEUU
Es aún pronto para saber si Swift será el factor decisivo para el votante indeciso entre Trump o a Biden, pero impulsa la participación electoral. Y tal y como están las encuestas, el electorado de la cantante podría marcar la diferencia.
¿Por qué Taylor Swift? La discusión en la redacción ha sido intensa. Una cantante no suele ser tema de apertura del ‘Diari’, tampoco lo suele ser portada de los periódicos económicos o protagonista de las columnas políticas. Pero Taylor Swift es un fenómeno que desborda los límites de lo habitual. Taylor Swift es todo. Taylor Swift es macroeconomía y es microeconomía. Taylor Swift es un factor de participación electoral en las próximas elecciones a la Casa Blanca de Noviembre de 2024.
Taylor Swift está en el debate de los feminismos, en el día a día de millones de personas de todo el planeta y de unos miles de tarraconenses que han decidido dejarlo todo y estarán en Madrid hoy y mañana para poder asistir a sus conciertos. Una cantante no suele ser la portada del ‘Diari’, pero Taylor Swift no es una cantante, es la persona más conocida del planeta, la más comentada, la más admirada, un fenómeno de masas indiscutible. Con ella, lo de menos es su música, aunque todo empezó en una granja de Pensylvania, una guitarra y unas botas de cowboy. El sueño americano de nuevo. El único sueño que sigue siendo el de todos.
¿Podría Taylor Swift realmente influir en las elecciones presidenciales de 2024? Lo que sí podemos afirmar es que su influencia podría aumentar la participación electoral y como es en la participación que está la base de un resultado tan reñido, sus palabras podrían determinar el futuro de la democracia en Estados Unidos. En los últimos meses, el apoyo de Swift se ha convertido en uno de los objetivos más codiciados y disputados de los estrategas electorales. Después de que el ‘New York Times’ informara de que la campaña de reelección de Joe Biden estaba desesperada por asegurar su respaldo, los aliados de Donald Trump declararon una «guerra santa» contra Swift. Los comentaristas de Fox News empezaron a instar a Swift a mantenerse fuera de la política, mientras que un contingente considerable de comentadores se sumergió en teorías conspirativas: que Swift es un activo encubierto para apoyar a Biden, que ella y su novio, Travis Kelce, son una farsa para apoyar a Biden, que la Super Bowl –en la que Kelce jugó y ganó para el equipo de fútbol americano Kansas City Chiefs – estaba siendo amañada para apoyar a Biden.
¿Puede una estrella del pop nacida en una granja de árboles de Navidad en Wyomissing, Pensilvania, realmente decidir las elecciones presidenciales de 2024? La respuesta es sorprendentemente compleja. Es improbable que la opinión de Swift sea el factor decisivo para un votante indeciso entre apoyar a Trump o a Biden –si es que tal persona existe– pero es mucho más probable que la superestrella del pop impulse la participación electoral. Y tal y como están las encuestas, el electorado de Swift podría marcar la diferencia. No estamos acostumbrados a personas como Taylor Swift con tanto poder político. Eso puede ser inquietante. Y mucho menos, que estas personas sean una mujer joven, deslumbrante y amante de la purpurina y las lentejuelas. Este es un factor esencial: Taylor Swift es una mujer joven que se enfrenta al poder con una ingenuidad apabullante.
Swift se adentró en la política por primera vez en 2018, cuando rompió su silencio para instar a sus fans a votar por los demócratas en una elección de Tennessee. Aunque su candidato perdió, Swift respaldó a Biden en 2020. También ha seguido instando a sus fans a votar en elecciones posteriores, y el registro de votantes ha aumentado en decenas de miles después de cada una de sus publicaciones en Instagram para promover el voto.
Su base de fans es asombrosamente grande, con un 53% de los estadounidenses diciendo que son fans y un 16% identificándose como «fanáticos», según una encuesta de Morning Consult de marzo de 2023. (Esa encuesta se realizó antes del lanzamiento del Eras Tour de Swift, que se ha convertido en la gira más lucrativa de todos los tiempos y que ha hecho de Swift una multimillonaria). El 53% de los demócratas dijeron tener una opinión positiva de Swift, mientras que solo el 28% de los republicanos dicen lo mismo.
En realidad estamos ante una persona de una singularidad total. Para darnos una idea de la importancia de Taylor, teniendo en cuenta las descargas de su música en Spotify es como si cada habitante del planeta hubiese escuchado tres de sus canciones. Son números de vértigo.
Los Beatles también cambiaron el mundo, pero fueron una banda que duró menos de una década, mientras que Swift ha estado en el ojo público durante casi dos. Muchos estadounidenses llevan años creando lazos emocionales con ella mucho antes de poder votar. Son personas que han seguido su descenso a los infiernos, su caída en desgracia, sus abucheos, son personas que se han identificado con su perseverancia, su lealtad inquebrantable a su familia, su defensa del derecho al aborto, su discurso claro contra el patriarcado. Son personas que han visto en Taylor un modelo, una mujer que abarca todos los géneros. Su tour en Europa es un paso más en una carrera que hace saltar todos los récords. No sabemos quién ganará las elecciones americanas el próximo noviembre, pero gracias a Taylor Swift es posible creer que el machismo asfixiante de los Donald Trump y Mileys no lo van a tener fácil.