El primer ministro húngaro, Víktor Orbán, visita Ucrania por sorpresa
Se ha reunido con Zelenski para tratar «el futuro de Europa, la seguridad, el derecho internacional y la Fórmula de Paz». Además, le ha pedido que considere un alto el fuego
El primer ministro de Hungría, Víktor Orbán, se reunió hoy en Kiev con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, con el que mantuvo una «importante conversación sobre el futuro de Europa, la seguridad, el derecho internacional y la Fórmula de Paz» ucraniana, según informó el jefe de la oficina presidencial ucraniana, Andrí Yermak.
«Se ha trabajado mucho para esta visita. Conversación importante sobre el futuro de Europa, la seguridad, el derecho internacional y la Fórmula de Paz», escribió en su cuenta Yermak, que publicó junto a su mensaje una fotografía de Zelenski y Orbán dándose la mano sobre un fondo de banderas ucranianas, húngaras y de la UE en el palacio presidencial de Kiev.
La Fórmula de Paz ucraniana es un documento impulsado por Zelenski que contiene diez demandas a Rusia entre las que destaca la retirada de sus tropas de todo el territorio ucraniano. Hungría no firmó el comunicado final de la Cumbre por la Paz organizada a iniciativa de Ucrania en Suiza a mediados de junio. El texto recogía algunas de las exigencias de la Fórmula de Paz.
Orbán viajó hoy a Kiev por sorpresa en el que es su primer desplazamiento a Ucrania desde el comienzo de la guerra. Se trata también del primer viaje de Orbán después de que Hungría asumiera este lunes la presidencia rotatoria de la Unión Europea.
El mandatario húngaro se ha posicionado en contra de la mayoría de iniciativas europeas para ayudar militar y financiera a Ucrania en el contexto de la invasión rusa. Orbán también se ha opuesto a las sanciones a Rusia, aunque ha dado su brazo a torcer en los momentos clave tras largas negociaciones en las que se le han ofrecido contrapartidas a cambio de levantar el veto.
Orbán considera que Ucrania vulnera los derechos de la minoría húngara del país con sus políticas para consolidar el ucraniano como lengua franca nacional en todo el país y rechaza que Kiev siga acercándose a la UE mientras no se cumplan sus demandas en este sentido.
El primer ministro magiar está en contra de enviar armas a Ucrania y pide una negociación para poner fin al conflicto, algo que Kiev rechaza al entender que supondría de forma inevitable una cesión de territorios a Rusia.
El político húngaro es percibido por muchos en Ucrania y el resto del mundo como el principal abogado del presidente Vladímir Putin dentro de la OTAN y el mundo occidental.
Víktor Orbán, pidió a Volodímir Zelenski que considere la posibilidad de negociar con Rusia un alto el fuego que permita «acelerar» las conversaciones de paz.
«Le he pedido al señor presidente que piense si existe la posibilidad de tomar un rumbo algo diferente, de hacer una pausa, de parar el fuego y después comenzar, continuar las negociaciones, porque un alto el fuego podría acelerar el tempo de esas conversaciones», declaró Orbán en una rueda de prensa conjunta con Zelenski marcada por la cordialidad entre ambos.
Antes de abogar por un alto el fuego que permita avanzar más rápido hacia el final de la guerra, Orbán declaró que «aprecia mucho las iniciativas para lograr la paz» de Zelenski, pero advirtió de que pueden tardar mucho en dar frutos.
Por su parte, el presidente ucraniano transmitió a Orbán que Ucrania espera contar con «el liderazgo» de Hungría para organizar «en los próximos meses» una segunda Cumbre por la Paz como la que se celebró a iniciativa de Kiev en Suiza a mediados de junio, a la que no fue invitada Rusia.
«Vemos la posibilidad de organizar la segunda cumbre este año, lo deseamos mucho», dijo Zelenski, que pidió a Hungría que tenga un papel «activo» en estos preparativos para una segunda edición de la cumbre en la que -según han declarado diversos portavoces de Kiev- sí podría participar Rusia.
El presidente ucraniano declaró recientemente que Ucrania elaborará antes de final de año una hoja de ruta para poner fin a la guerra que podría entregársele a Rusia tras recibir el apoyo de una parte significativa de la comunidad internacional.